En un comunicado, la agrupación de electores critica la gestión municipal y aseguran que se producen contrataciones “filibusteras”.
La agrupación de electores Sorian@s que encabeza el concejal Luis Alberto Romero en el Ayuntamiento capitalino ha puesto el foco este viernes en la política de Personal que están llevando a cabo los responsables municipales.
En un comunicado de prensa, hablan de contrataciones “filibusteras” con duplicidad de puestos en el departamento de Cultura y también la situación laboral de los bomberos. Además, subrayan que la gestión sigue un modo “esclavista” hacia los trabajadores, en vez de hacer defensa de ellos.
El comunicado, literal, es como sigue:
“Como decía Antonio Machado, ‘en política sólo triunfa quien pone la vela donde sopla el aire; jamás quien pretende que sople el aire donde pone la vela’. De eso sabe mucho nuestro Equipo de Gobierno, con el señor alcalde a la cabeza; los que más
defienden a los trabajadores, manifestándose el 1º de Mayo, pero los mayores esclavistas dentro de su propia casa.
Trabajadores expedientados por no utilizar los tornos, cuando el mismo Ayuntamiento lleva casi un año sin ponerlos. Bomberos que hacen turnos de días seguidos sin descanso por los que un juez ha sacado los colores a nuestros mandatarios, que de momento han hecho caso omiso a la sentencia, claro que con el dinero del contribuyente siempre es recurrible, por si cae la breva y se les da la razón, eso sí, pagando unas minutas de abogados externos como para contratar a dos abogados laboralistas un año, y sin que ningún concejal del Equipo de Gobierno responda por nada cuando se pierden los juicios. Contrataciones ?filibusteras con puestos duplicados en Cultura, por poner sólo un ejemplo, mientras falta personal fijo en el Almacén, que con las jubilaciones cada vez quedan menos empleados fijos, porque es mejor contratar a trabajadores temporales para que hagan todo lo que uno quiere, aunque no tengan que hacerlo, y poder echarlos cuando uno quiera o no, depende de la afinidad o parentesco que haya.
Policías y bomberos con miedo a la concejala que dispara expedientes a quien no ríe sus gracias, como el que reparte caramelos, lo cual no le supone ninguna responsabilidad. Y en general, una política de Personal llevada a cabo como el que rige un cortijo, como un señorito de los de antes, aunque surja algún problemilla de vez en cuando. ‘Nuestro carácter nos hace meternos en problemas, pero es nuestro orgullo el que nos mantiene en ellos’ (Esopo, s. VII AC), así que aplíquese el cuento, señor alcalde”.