Ascensión Pérez Gómez se sienta en el rincón de Soria Noticias

Pregunta: ¿Qué es lo último que hace antes de acostarse?

Respuesta: Uff. Después de la jornada laboral siempre queda trabajo en casa. Estoy casada y soy madre de dos hijos así que ya te puedes imaginar lo que eso significa. Antes de dormir siempre tengo algún expediente pendiente o algo relacionado con el negocio de las casas rurales que he puesto en marcha. Pero siempre intento sacar 15 minutos para relajarme en el sofá. Me pongo la televisión pero casi siempre me quedo dormida.

P: Cuando tiene una tarde libre, ¿a qué le gusta dedicarla?

R: Me gusta tomar café con los vecinos de mis pueblos y me encanta pasear por la naturaleza que los rodea. Además tengo la afición de recoger troncos marchitos para intentar darles una segunda oportunidad. Me sirve para ver las cosas de forma diferente y reflexionar.

P: ¿Libro o película?

R: Cualquiera de las dos cosas. Si estoy más relajada me gusta leer. ¡Me encanta la poesía!

P: ¿Qué música pone cuando se ducha?, ¿Canta?

R: Me gusta mucho la música actual, Malú, Pablo Alborán, Enrique Iglesias... Pero soy demasiado vergonzosa y no me atrevo a cantar ni en casa (ríe).

P: ¿Cuál es su palabra favorita?

R: Mejor una frase: “Si quieres, puedes”. Soy una mujer optimista y eso me da el estímulo necesario para seguir adelante cada día.

P: Animales. ¿Le gustan? ¿Cuál es su favorito?

R: Me encantan los caballos aunque les tengo muchísimo respeto. Soy una mujer rural pero una yegua llamada Macarena me hizo ver que igual cuidar de ellos no es lo mío.

P:Si pudiera viajar en el tiempo, ¿iría al pasado o al futuro?

R: Iría al futuro. El pasado está bien para conocer tus señas de identidad y saber a dónde vas pero, sin duda, hay que mirar siempre al futuro.

P: ¿Cómo era de pequeña?

R: Rebelde. Siempre he sido como soy ahora. Estudié en un colegio rural hasta que me llevaron interna a la Escuela Hogar de Soria. Fue una experiencia maravillosa. Era feliz.

P: ¿Era muy fiestera?

R: Lo era y lo sigo siendo (vuelve a reir). Siempre me ha gustado salir y hablar con todo el mundo. Además en los pueblos y en verano hay verbenas por todos los sitios.

P: ¿Quién ha influido más en su forma de ser?

R: Mis padres. Son unas personas muy especiales y me aportó cada uno lo mejor de sí mismo. Mi madre tenía la mente abierta a todo, su energía, su vitalidad,... Mi padre me enseñó a ser práctica y resolutiva. Y me dejó su don para las relaciones sociales que también está muy bien.

P: ¿Y qué no le enseñó nadie y tuvo que aprenderlo a base de palos?

R: Supongo que unas cuantas cosas. La primera llegó con la maternidad a los 20 años. La segunda, con mi entrada en política a los 32. Por aquel entonces no había muchas mujeres alcaldesas y eso supuso trabajar por hacerme a mí misma.

P: ¿Cuál es el mayor éxito de su vida?

R: La mayor satisfacción ser madre. También me llena de orgullo haber sido alcaldesa porque supone mucho que las personas que te conocen y que conviven contigo te den la confianza para gestionar sus intereses

P: ¿Y su mayor fracaso? Algo que pueda reconocer.

R: Tengo la asignatura pendiende de haber estudiado una carrera. Los idiomas también son mi espinita.

P: ¿Cuál es su momento favorito del año?

R: Tengo varios. El día de el Arca, en Reyes, es especial. Después de tantos años y todavía me levanto nerviosa. ¿Parece mentira verdad? Aún así, cualquier día de reunión con los amigos es el mejor momento del año.

P: Dígame algo que no soporta

R: La hipocresía y la falsedad. Que te doren la píldora y por detrás...

P: ¿En qué lugar de la provincia le gustaría perderse?

R: El robledal milenario de la Dehesa de Almarza y San Andrés, el hayedo de Gallinero. Por supuesto, no me puedo olvidar de Barriomartín, mi pueblo.

P: Dígame un lugar del mundo que le haya impresionado

R: París y Roma.

P: Y algún viaje que tenga pendiente...

R: Muchos. A Costa Rica.