Homenaje a la patrona de las fiestas de San Juan

Las Cuadrillas de San Juan han celebrado esta mañana el tradicional homenaje a la Virgen de La Blanca, patrona de las fiestas de San Juan de la capital soriana, unas fiestas que aunque tienen un origen pagano, encuentran en El Lunes de Bailas su perfil más religioso.

En torno a las 11:30 horas, se ha celebrado en la ermita de la Soledad la misa en honor a la Virgen de La Blanca, que preside la ceremonia, con presencia de los santos titulares de las Cuadrillas, los jurados y los secretarios, junto a las autoridades locales.

El protagonismo y la responsabilidad de esta jornada es para la Cuadrilla de La Blanca y sus jurados, los hermanos Álvaro y Paula Borque, que llegan los primeros a la ermita, a la espera de que lleguen el resto de Cuadrillas con el habitual y riguroso orden, con la excepcion de La Mayor, cuya imagen no asiste por tener un mismo rango que la advocación de la Virgen de La Mayor.

Se trata del momento más serio y solemne de las fiestas, que se traslada en la elegancia y gravedad de la vestimenta, de negro y mantilla las juradas y trajes oscuros los jurados. Tras la misa, las Cuadrillas y sus imágenes desfilan, de manera inversa al orden habitual hasta la plaza Mayor. La primera en llegar es la Virgen de La Blanca, que se coloca en la escalinata del Ayuntamiento, a la espera de recibir la pleitesía del resto de Cuadrillas y santos, con una breve reverencia, salvo en el caso de La Virgen de La Mayor y El Salvador, que pasan por delante sin reverencia por ser otra advocación de la Virgen y representar a Dios, respectivamente.

Tras hacerse el acto de pleitesía, la música de las charangas de las Cuadrillas cambia de las marchas procesionales a la festiva de las sanjuaneras, para continuar luego con el último deber de los jurados en fiestas, que es recorrer con la imagen del Santo todas las calles de la ciudad -incluidas las pedanías- que conforman cada una de las cuadrillas. Una visita muy querida por muchos vecinos, que se alarga hasta las tres y cuatro de la tarde.

Las peñas también han participado en el desfile hasta la plaza Mayor, y también han rendido la pleitesía a la Virgen de La Blanca, con la entrega de flores y, en algún caso, pequeños gestos simbólicos, como la suelta de palomas y de globos.

Tras una mañana, de perfil religioso y solemne, en el último día de las Fiestas de San Juan, se da paso a una tarde festiva con la merienda en la pradera de Las Bailas y el entorno de San Santurio.