En el conjunto de la región, el pasado mes fue el tercero más lluvioso de los últimos cien años.
Castilla y León ha registrado uno de meses de junio más lluviosos del último siglo ya que, según los registros de los observatorios principales, ha sido el mes con un balance medio más alto desde 1988 y el tercero de los últimos cien años, según consta en el Avance Climatológico elaborado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y recogido por Europa Press.
No obstante, la mayor parte de las precipitaciones fueron en forma de chubasco, con numerosas tormentas y con unos valores acumulados que no se distribuyen de forma homogénea. En la mayor parte de la Comunidad el mes ha sido "húmedo o muy húmedo" con un balance de precipitación acumulada que se sitúa en torno al 150 por cien por encima de su promedio y con un número de días de precipitación "apreciable" que fue prácticamente "el doble de lo normal".
En el caso concreto de los observatorios de Ponferrada y Soria la precipitación acumulada fue la más alta de todas las registradas en su serie histórica, por lo que son efeméride y su balance es de "extremadamente superior a lo normal".
Según explica la Aemet en su informe, en los primeros doce días del mes las precipitaciones fueron más generalizadas mientras que en la última decena, "con numerosas tormentas", las precipitaciones se hicieron más dispersas. El valor más alto se registró en Villablino (León), con 200 litros/metro cuadrado mientras que en zonas del Suroeste de Ávila no se superaron los 15 litros/metro cuadrado. Algunas precipitaciones se registran de forma intensa y, localmente, con granizo.
En cuanto a las temperaturas, junio registró una media "normal" en la mayor parte de la Comunidad donde los termómetros se situaron de media 0,1 grados centígrados por encima de su promedio. No obstante, en algunas zonas del norte y, sobre todo, del noroeste de Castilla y León junio fue "ligeramente cálido" mientras que, por el contrario, en áreas del sur fue "ligeramente frío".
Según este informe, a pesar de que la evolución de máximas y mínimas fue similar a lo largo del mes su comportamiento fue contrario con un balance positivo para las temperaturas nocturnas y negativo para las diurnas.
La Aemet también destaca la diferencia de los valores registrados en la primera y en la segunda quincena del mes con una oscilación media entre ambas de 7 grados, que llegó a ser de casi 10 grados en el caso del ascenso medio de temperaturas máximas entre la primera y la segunda mitad del mes. En concreto, la temperatura más alta se registró los días 23 y 24 con 39 grados en el Valle del Tiétar (Ávila), que contrasta con los valores registrados el 5 de junio cuando la temperatura media diurna se situó en 15 grados.
Por su parte, la temperatura mínima más baja se registró en varios días de la primera decena del mes en zonas de montaña de la Comunidad con valores que oscilan en torno a los 3 grados