Ser feliz está de moda

Cada vez es mayor la información que recibimos de mensajes de felicidad, fotos y estados de nuestros amigos, conocidos, personajes públicos… Pero, ¿es real esa felicidad? ¿O simplemente es ‘postureo’?

En la mayoría, por no decir en todos los casos, es cierto o podría ser muy cierto. Pero tiene una doble lectura, y es que las personas que se dedican a expresar su momento de felicidad, como tranquilidad, alegría, diversión, viaje a lo desconocido, experiencia, etc..., y que necesita compartirlo con los amigos o seguidores, cosa que les hace sentirse más felices todavía, no expresan también el momento de cansancio, enfado, tristeza o aburrimiento en el que nos encontramos inmersos todos los mortales.

Este hecho hace que interpretemos de forma errónea nuestros estados emocionales negativos. Y es que estar ‘mal’, como solemos o suelen expresar los pacientes, sin concretar si es aburrido, cansado o triste, es un estado más habitual de lo que solemos expresar, y por lo tanto es normal vivirlo

Y si lo identificamos como tal, podremos intentar no alargar nuestro malestar en el tiempo, adoptando actitudes y comportamientos que nos ayuden a terminar el día más tranquilo, descansado o habiendo arreglado una preocupación.

A veces somos impacientes con respecto a pasarlo mal, y no toleramos ese estado porque ser feliz está de moda, y si esta actitud hace que cuando sufrimos un trastorno se alargue mas en el tiempo, ya que no nos permitimos estar mal y por tanto pedir ayuda a un profesional.

Y cuando lo hacemos, queremos recuperarnos en tiempo récord porque no toleramos el malestar y sufrimiento, sin darnos cuenta que depende de nosotros y de la actitud que adoptamos cuando estamos mal.

Afortunadamente, pedir ayuda a los profesionales comienza a estar de moda.