Del “cambio de ciclo” a la “continuidad de una base”: Huerta relanza al Numancia B

Evolución progresiva en la Ciudad del Fútbol. La estabilidad y el proyecto del CD Numancia B tienen nombre y apellido propio: José Alejandro Huerta. El de Abejar lidera por tercer año consecutivo al filial. Desde "la dominación al rival, el juego combinativo, la posesión del balón o la presión agresiva sin balón”, el filial numantino aborda un curso que debe relanzar, en su total plenitud, el plan de un hombre de la casa, Huerta.

“Hemos completado una pretemporada regular. Llegamos en buen momento”, considera el preparador soriano. El filial numantino, en estado de gracia al arranque liguero, en el Grupo VIII de Tercera división. Huerta quiere reflejarse “en el Numancia B del año pasado”, aquel que mostró “seguridad defensiva”. El filial fue el segundo equipo menos goleado de la categoría (30 goles encajados). Sólo la Arandina (26 tantos) superó los registros sorianos.

“Fuimos un equipo con más soltura y desparpajo que el año anterior”, prosigue el de Abejar. Y es que el tercer año seguido de Huerta en el banquillo del Numancia B debe ser el de la confirmación definitiva. La octava plaza, rellena de 66 puntos, que logró el ‘B’ la temporada pasada le deja el listón alto a este renovado Numancia en esta presente campaña. “Quiero dar continuidad”, insiste Huerta. No es ya “el cambio de ciclo” del pasado año, sino “la continuidad de una base” asentada por Huerta. Nueve jugadores que militaron al lado de Huerta y Dani Lagunas, segundo entrenador, prosiguen su andadura en el filial. Seis refuerzos (Taliby, Roberto Jara, Toni Varea, Diego Cámara, Álvaro Mateo y Julen Ekiza) y cinco ascensos desde los Juveniles (Raúl Hernández, Daniel Ceínos, Ismael Medrano, Jorge Ferrer y Mohamed Sanhaji) completan la expedición numantina.

“Soy optimista, sin marcarnos objetivos ambiciosos de play-off o de ascenso como una obligación”, reseña el míster soriano. Quiere verse “arriba”, sin especificar el dónde, con el Numancia B. Competirá “de tú a tú” contra los pesos pesados del grupo castellano y leonés. “Las capitales de provincia, como el Real Ávila, el Zamora o la propia Arandina, han hecho equipos con presupuestos altísimos”, asevera Huerta, quien es “ambicioso”. El Numancia B se moverá entre esas altas esferas. “Nuestro objetivo no es el clasificatorio, como puede ser el de otros. Nosotros nos centramos en la formación de jugadores, para abastecer a corto o a largo plazo al primer equipo”, subraya. Este filial “no renunciará a nada” e intentará “competir desde el primer hasta el último día” con una “identidad clara”. La filosofía numantina no se toca, ni se negocia.

El técnico de Abejar está “en un hilo directo de comunicación” con Aritz López Garai. “Cuando los jugadores de la base dan el salto al primer equipo es un reconocimiento”, entona un enorgullecido Huerta. Taliby, Álvaro Mateo, Álvaro Belizón han contado para López Garai durante la pretemporada del CD Numancia. Luego, Vallejo, Marcos, Silva o Checa también han participado con el primer equipo. “A López Garai no le va a temblar el pulso a la hora de dar entrada a estos jugadores. Con lo cual, contento”, pronuncia Huerta.

Huerta ha notado “un crecimiento” en el Grupo VIII de Tercera división. Ejemplifica en base a lo acontecido durante la pasada campaña: “Hasta ocho equipos estuvieron inmersos en la lucha por el play-off de ascenso, algo muy llamativo”. Este año, “se ha dado un salto cualitativo y cuantitativo porque a los equipos les está entrando dinero televisivo”. Para Huerta, “la Gimnástica Segoviana, el Zamora y la Arandina” son los rivales a batir. Como “aspirantes” ve a la SD Almazán o al Virgen del Camino, “las incógnitas”, también. A su Numancia B no sabe “donde encasillarlo”, pero le augura un buen futuro: “Otro aspirante”.