El Numancia ahogará las penas ocasionadas en la Copa en El Molinón, donde habrá que “sostener el árbol” ante las embestidas gijonesas. Ese partido de Liga, otra vez se miden contra los asturianos, “es otra historia”.
Aprovechar el momento. Vivir el día a día. “Tendrá que ser Carpe Diem sí o sí”, presentaba así López Garai, entrenador del Numancia, la quinta jornada de Liga que ubica a sus muchachos en El Molinón. La recomposición de la escuadra rojilla, en juego tras el reciente fracaso en la Copa del Rey contra el mismo Sporting de Gijón, al que se mide nuevamente en la misma semana. El Numancia y López Garai están más animados. Ahogarán sus penas en la categoría de plata. Los menos habituales, Gaizka Campos o, incluso, Marcos Isla, recibieron la felicitación del míster. “Hay futbolistas que están preparados” para cuando los llame López Garai. Misión cumplida: validación del Plan B el pasado 13 de septiembre en la Copa.
“Lo de ayer, como la misma palabra dice, fue ayer. Hay que pensar en el hoy, en el mañana y en el domingo, que viene la competición liguera contra el mismo rival que tuvimos ayer, el Sporting. A partir de ahí, al grupo, al que he felicitado, le he visto bien”, contextualizaba el técnico vasco. El partido del domingo (20:30 horas, El Molinón) “es otra historia”, aseguraba en la rueda de prensa posterior al compromiso.
Con consciencia, “va a ser otro tipo de partido”, ya que “el Sporting en casa es fuerte”. Allí, “la gente le va a empujar. Les va a exigir que ataquen. Nos tocará aguantar ese empuje”, argumentaba. Después, el Numancia deberá volver por sus fueros: “Ser nosotros mismos, con esa personalidad fuerte”. Considera que no se trata de “una campanada” el hecho de que el Numancia gane en Gijón. “Puede ganar perfectamente en El Molinón”, puntualizaba. La alineación que le otorgó los primeros tres puntos de la temporada al Numancia se repetiría, “en un porcentaje alto”, en Gijón. “Habrá que achicar agua y apretar el culo”, narraba López Garai.
“No renunciaremos a lo que somos”, valoraba López Garai. Porque, entonces, “no sabríamos a lo que jugamos”. El técnico del País Vasco mentaliza a sus pupilos: “Si no defendemos bien, no puntuaremos. Hay momentos en los que hay que sostener el árbol cuando empujan, y hay que aguantarlo”, narraba sobre la garra gijonesa. “El Sporting en casa será más incisivo. Nos achucharán y deberemos sostenernos en pie”, analizaba
“Juntos sale todo mucho mejor”. Mensaje de unidad. Piña. “La noche de ayer ya se me hizo larga en casa”, lamentaba López Garai, quien confía en el ‘factor Los Pajaritos’, aunque se disgustase con éste ayer. “La gente, al final, lo que quiere es que el equipo gane. Ese es el resumen final”, apostaba el de Barakaldo. “Todos somos entrenadores. A todo aquel que le gusta el fútbol opina. Es inevitable”, valoró. Se atrevió a “pedir” que la gente “tenga un poco de paciencia con los chicos”. Se trata de un equipo “joven” y que “está empezando”.