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A las de Vera, en su debut, se les escurre el triunfo al final de la segunda mitad

A las de Vera, en su debut, se les escurre el triunfo al final de la segunda mitad

Actualizado 09/10/2018 13:39

Las Guerreras del Moncayo se traen un punto a Ágreda (24-24) después de ir por arriba durante prácticamente todo el partido de la primera jornada de la Primera Nacional Femenina. La Jota de Zaragoza se escapó viva.

El primer punto, al saco. El Sénior femenino del Balonmano Ágreda, equipo bajo la batuta de Juan Carlos Vera, debutó con un empate (24-24) en casa del Reciclajes del Ebro La Jota. Las Guerreras del Moncayo, quienes aguardan su turno hasta el próximo 21 de octubre para disputar el segundo partido de Liga en su estreno en casa, se colocan en la tercera plaza de la Primera Nacional Femenina de Aragón. Vera no pudo contar en Zaragoza con Isabel, “una pieza clave” en el juego del BM Ágreda, aunque se estrenó María Pérez, la jugadora andaluza que ha incorporado la escuadra de la Villa de las Tres Culturas.

Las primeras tablas a domicilio no acabaron de convencer al míster del BM Ágreda. Después de ir por delante durante prácticamente toda la contienda (hasta el minuto 40 de la segunda mitad), el triunfo final se le escurrió entre los dedos al bloque femenino de Ágreda. Por eso mismo, “le doy una valoración regular”, manifiesta Vera, quien sabe que la victoria estaba a pedir de boca. Las zaragozanas y las sorianas se batieron en un partido intenso. “Al final, nos pasó factura la segunda parte”, alega el preparador de las féminas de la villa. Aquel choque era propio de la “décima jornada de Liga”, exagera. Antes de que se fundiesen las Guerreras del Moncayo, el marcador les era muy favorable. Llegaron a situarse hasta siete goles por encima de las mañas, mostrando una actitud de superioridad.

Tras la reanudación, “ellas ajustaron ciertos aspectos de su defensa y nosotros no supimos controlar ciertos minutos del partidos”, apunta Vera. Poco a poco, las locales iban recortando goles al paso de unos minutos que se le hacían horas al BM Ágreda. Y menos mal que Paula Cacho desarboló la remontada maña con paradas en “momentos decisivos del partido”. Sin embargo, “fríamente”, Juan Carlos Vera sopesa un cambio radical sobre su concepción de ese punto “regular”: sacan un empate fuera de casa contra uno de “los rivales directos” e igualan el factor campo. ¡No está tan mal! “Consideremos que es un resultado aceptable, pero hemos de mejorar en muchos aspectos”, explica el técnico de las Guerreras del Moncayo, quien quiere verse “arriba”, en la Primera Nacional Femenina. Subsanar algunos deslices, su misión antes del 21 de octubre. “Saber controlar el partido” y despedir “la ansiedad”, precisa Vera. El míster instiga a sus pupilas “a saber jugar con el marcador”. Vera empieza a “saborear” un punto que acaba dando por “bueno”.

Están “tranquilos”, pues la Liga “es muy larga”. A tres vueltas. Tan sólo se ha disputado el primer partido de esta competición femenina. A las féminas agredeñas nadie les gana en actitud: “Físicamente no llegábamos al final del partido. El grupo se veía sin fuerzas, pero peleó hasta el final, Estoy muy contento con ellas, por supuesto”, pronuncia. Al BM Ágreda le sigue restando apuntalar su fondo de armario. Estudios, trabajos, compromisos, etc. No es fácil encontrarlas a todas sobre la cancha. Faltan perchas en el ropero. El club encuentra soluciones en la cantera, la cual ha de ir asimilando el juego del Sénior agredeño.

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