Si no eres ningún prodigio en el arte del maquillaje y de la peluquería, pero sí que te gusta verte bien, te damos unos consejos. Solo necesitas pulir ciertos gestos cotidianos. Un artículo de Lorena Martínez.
Si entras pronto a trabajar y madrugas demasiado, seguramente no te dé tiempo a peinarte como te gustaría. Un buen consejo es que si tienes el pelo rizado, antes de acostarte, extiendas una capa de sérum o acondicionador sin aclarado, especialmente en las puntas, evitando la raíz para que no se engrase. Después, hazte una coleta suelta a la altura de la nuca con una goma de tela. Amanecerás con el cabello dócil y con el volumen controlado. Si tu pelo es corto y tienes algún remolino, una buena idea es que de noche apliques una gota de acondicionador sin aclarar. Éste aportará flexibilidad y humedad al mechón del remolino.
Si tu cara al levantarte es un poema, hazte fan de las ‘BB cream’. Son una de las mejores opciones para cambiar nuestra cara y aportarnos luminosidad y un efecto jugoso en el rostro. Hidratan y además son capaces de camuflar las pequeñas imperfecciones. Pero si tienes granitos, será importante que los trates con una loción con minerales marinos y pigmentos matificantes. Si tus granos son rojizos, aplica primero un corrector verde para neutralizar el tono. Encima aplica un poco de base con un tono beige, e incluso después unos polvos sueltos para fijar y difuminar. Extiéndelo todo muy bien para que no se note.
Si tu rostro contiene muchas imperfecciones, puedes desviar la atención hacia otras partes que te gusten más como tus ojos, potenciándolos con un ahumado profundo. O hacia los labios, maquillándolos con más volumen.
Sabemos que a veces maquillarte puede resultar costoso y muy complicado si no dispones de tiempo. Pero bastan 5 minutos si sabes como usarlos.
Para tu piel, aplica una base de polvo con la ayuda de una brocha. Tardarás solo un minuto. Si dispones de 2, antes extiende una base fluida que es más cubriente y te ayudará mejor a unificar el tono de tu piel. Y esta incluye un corrector para cubrir imperfecciones y base para párpados sería ideal.
En cuanto al colorido, hazte con un único producto que sirva de sombra y colorete. Así evitarás tener que coordinar los colores. No olvides un pequeño toque de rímel e hidratar bien tus labios, ya sea con un labial en tonos pastel o con un buen cacao o vaselina. No olvides esta parte tan importante de la cara. Unos labios jugosos siempre dan muy buena imagen. Al no tener tiempo es importante que no escojas tonos de labial oscuros, ya que estos requieren mucha más paciencia para aplicarlos y, además, deberán quedarte perfectos para que el efecto sea el deseado. En el lado contrario, los labiales más claritos y jugosos nos aportan volumen y son fáciles de aplicar, incluso de camino al trabajo.
Las manos son una carta de presentación muy importante, así que mantenlas en las mejores condiciones. Quien cuida esta parte de su anatomía, dice mucho de esa persona. Si no tienes tiempo para realizarte la manicura, o si tu trabajo no permite que tu pintauñas permanezca durante más de un día en tus uñas, hazte usuaria habitual de la manicura semipermanente o de las uñas de gel. De esta forma, durante al menos 15 días permanecerán tus manos con un aspecto inmejorable.
Si además no quieres retocar tu maquillaje en todo el día o quieres hacerlo lo más mínimo, deberás escoger productos siempre resistentes al agua y de larga duración. No olvides echar en tu bolso lo imprescindible para retocarte si fuera necesario.
A la hora de eliminar el maquillaje, deberás utilizar desmaquillantes específicos y aplicarlos suavemente.