El olmo viejo, los chopos en la orilla del Duero y “la una” en el reloj de la Audiencia siguen recordando el camino del caminante sevillano más soriano. En 2018 se han cumplido 79 años desde que muriese el que sentó cátedra de francés en un instituto que ahora lleva su nombre. En 2017 se cumplieron 110 años de su llegada a una ciudad que le robó el corazón, como lo hizo también Leonor.
“Y cuando llegue el día del último viaje, y esté al partir la nave que nunca ha de tornar, me encontraréis a bordo ligero de equipaje, casi desnudo, como los hijos de la mar”. Y sí, Antonio Machado (26/07/1875, Sevilla) desnudó completamente su alma en Soria, donde echó raíces, casándose con la soriana Leonor Izquierdo. Sus letras y la esencia machadiana siguen perpetuas en la ciudad a la que llegó en 1907. En 2017 se cumplieron 110 años desde el desembarco de Machado en una tierra “árida y fría”. Sin embargo, caminante sí hay camino: los pasos de Machado, grabados a fuego en la capital. Todavía se respira la fragancia machadiana en Soria:
Sentó cátedra, impartiendo clases de francés, en un centro que para siempre llevará su nombre: el Instituto Antonio Machado. En la calle Estudios, en la segunda pensión en la que se hospedó, el poeta se enamoró de su futura esposa, Leonor Izquierdo, con la que se casaría en 1909 dentro de la iglesia de la Mayor, la cual forma parte de la geografía de la plaza Mayor. En ese mismo punto, “la campana de la Audiencia da la una”. Machado también dejó su impronta en las agujas de uno de los escenarios más neurálgicos de la capital.
El olmo viejo de ‘Campos de Castilla’ se sitúa en las inmediaciones del cementerio de Soria, donde está enterrado el amor de Antonio Machado. Y es que Leonor Izquierdo, quien falleció un 1 de agosto de 1912 (a los 18 años), enfermó de tuberculosis. Durante el transcurso de la agonía de la joven soriana, largos paseos en la ermita del Mirón, cuando una de las parejas más célebres que ha dado Soria se encaminaba hacia el mirador de Los Cuatro Vientos (en el que al final se levanta una gran oda al amor, las siluetas talladas de Leonor y Antonio).
En las orillas del Duero, ”estos chopos del río” todavía lloran la muerte de Machado, quien regresó a Soria en 1932. La ciudad le nombró ‘hijo adoptivo’, frente a San Saturio, el 5 de octubre de ese ejercicio. El poeta murió, aunque su corazón se quedó en Soria para la eternidad.
Plaza Mayor. Antonio Machado y Leonor Izquierdo se casan en esta iglesia el 30 de julio de 1909. En esta misma iglesia se celebraron los funerales de Leonor el 2 de agosto de 1912. El exterior del templo acoge actualmente el Rincón de Leonor, espacio habilitado en su memoria que incluye una escultura de la musa machadiana. En la misma plaza Mayor, el reloj que corona el edificio de la Audiencia, hoy centro cultural, también ocupa un lugar entre los versos del poeta.
El Mirón. Antonio Machado alquiló una casa a la entrada del paseo que lleva hasta la ermita de Nuestra Señora del Mirón. Muchas tardes sacaba a Leonor a pasear hasta el mirador de Los Cuatro Vientos, paraje que acoge un conjunto escultórico en su recuerdo.
Círculo de Amistad Numancia. Machado fue socio del Círculo de la Amistad, a pocos pasos de su segunda pensión en la calle Estudios, lugar de tertulias que continúa hoy abierto. Su decoración, aunque remozada, conserva un aire decimonónico.