Amistad con los perros

Los medios de comunicación difunden que las mascotas caninas forman parte del núcleo familiar humano: los dueños de perros posan con naturalidad en imágenes navideñas; una asociación potente anuncia que cada vez son más y que reivindican “la creación, mantenimiento y mejoras de los pipican, así como espacios en el extrarradio para perros sueltos controlados”; otra asociación crea la campaña “Tener perro es molón, no dejes en Soria su marrón”, con idea de concienciar y adquirir responsabilidades; Alzheimer Soria trabaja en terapias con mascotas; Soria busca tener como cualquier ciudad europea “turismo dog friendly”. La ordenanza no fiscal colgada en la web del Ayuntamiento regula en 72 artículos la tenencia de animales domésticos y de compañía.

Fabiana, biznieta del guardabarreras de Adradas, dedica quince minutos semanales en retirar con cortezas de chopo, en 30 m2 de Sotoplaya donde trabaja, una decena de heces caninas: minúsculas, congeladas, alargadas como chuzos, gordas como albóndigas, en solitario, grupales, abandonadas en base arbórea, aplastadas aquí o allá, oscuras, blanquecinas o en descomposición.

"¡Intolerable!", dice malhumorada. Confundimos parques con muladares.

Pues sí. El sentido cívico no puede mirar para otro lado.