El libro sobre Vicente Marín concita interés en Madrid

El salón de actos del Centro Cultural de los Ejércitos acogía este jueves la presentación en Madrid del libro ‘Las buenas y malas noches de Vicente Marín’. Una sala abarrotada en la que actuó como moderador el ingeniero y escritor, natural de Serón de Nágima, José Antonio Alonso, quien fue dando la palabra a los intervinientes de los que previamente realizó una breve semblanza biográfica.

En primer lugar habló el autor del libro, el abogado y licenciado en Filosofía y Letras Javier Narbaiza. En su disertación desgranó los tiempos y etapas en los que se fue gestando el libro, desde las iniciales reticencias del protagonista a difundir su recorrido vital hasta su decisión de contar su peripecia, sin omitir episodio, e incluso detallar cumplidamente los escarceos con Ava Gadner, que más bien fueron los acosos de la actriz americana al entonces chico guapo de Bretún. Seguidamente, Javier procedió a perfilar la dura infancia de Vicente Marín en su pueblo, y posterior recorrido por seminarios, quehaceres y faenas penosas para ganarse el sustento, labores como mayordomo y trato próximo con la alta sociedad y muchos personajes con glamour. Desde ahí, tras conocer al conde de Atarés, Vicente Marín se introdujo con éxito en el mundo de la hostelería de prestigio, hasta recibir el importante legado hereditario que posibilitó que todo un tesoro artístico y cultural de entidad se haya concentrado en Bretún, su lugar de nacimiento. Tras constituir la Fundación que lleva su nombre, vive volcado en un proyecto encaminado a que a este lugar de la España vacía, sito en las Tierras Altas de Soria, vuelvan la gente y la vida.

A continuación, intervino el catedrático jubilado de Lengua y Literatura, nacido en La Riba de Escalote, don Jesús Hedo Serrano, quien profundizó en la carpintería literaria diseñada por Javier Narbaiza, destacando semejanzas entre el protagonista con motivos y pasajes de la tradición picaresca, con abundamiento investigador de citas y parecidos entre lazarillos y buscones con un aventurero de recientes tiempos como ha sido un atrevido Vicente Marín, quien hoy vive, satisfecho, feliz y conforme, en su plácido retiro en Bretún.

Tomó la palabra después la soriana y catedrática de Geografía Humana de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid doña Mercedes Molina. Persona preocupada y comprometida con el problema de la despoblación, procedió a desarrollar las características y condiciones que presenta el desolador panorama de la despoblación en Soria, y la necesidad de activar políticas públicas para devolver vida y recursos a esas zonas prácticamente abandonadas a su suerte. Asimismo, elogió el esfuerzo de individuos como Vicente Marín, que de forma totalmente altruista, han apostado todo su patrimonio en un proyecto personal para que la riqueza que han aportado pueda motivar una respuesta turística de alcance, capaz de atraer a visitantes interesados en conocer las bondades, en este caso, de las Tierras Altas sorianas.

Intervino luego el Ilmo. Sr. D. Manuel Fuertes de Gilbert y Rojo, Barón de Gavín, doctor en Derecho y académico de las Reales Academias de la Historia y de Jurisprudencia y Legislación. En su condición de experto en Genealogía, Heráldica y Nobiliaria, el barón de Gavin, se centró en la figura del conde de Atarés, mostrando el importante papel histórico de los antecesores de Miguel López Diez de Tuesta en la historia de España, así como las características de este curioso personaje, con el que Vicente Marín hizo equipo durante más de cuarenta años, recibiendo el encargo de dirigir en Madrid el importante hotel Galiano, tarea que asumió consiguiendo los mejores resultados económicos y de prestigio.

Cerró el acto el protagonista del libro don Vicente Marín, quien, visiblemente emocionado, agradeció presencias, solicitó implicaciones de organismos y autoridades con competencia para impulsar un necesario desarrollo e invitó a los asistentes a visitar esta zona de Soria y conocer Bretún y sus icnitas, amén de los tesoros que alberga la Fundación, y recorrer por los caminos de tantos privilegiados y un tanto inéditos lugares de las Tierras Altas de Soria.