Crónica de un jueves de campaña en Soria: De las flores populares a las migas socialistas

Los jueves no es un día cualquiera. Está escrito en la idiosincrasia de nuestra ciudad; el jueves día de mercado. Ya no se viene a la capital a ajustar el precio del trigo o a mercadear con ganado, pero la tradición la mantienen vivas decenas de hombres y mujeres (en realidad casi todos son hombres) que cada jueves vienen a la capital como si de una peregrinación religiosa se tratase a encontrarse con sus amigos y hablar de cómo está el patio.

Almuerzos y vermut que se alargan durante horas, entre fanfarronadas y añoranzas del pasado. Siempre con un botellín de Mahou en la mano que ayuda a engrasarlas nunca sencilla relaciones sociales en una ciudad castellana como Soria.

Pero este no es un jueves cualquiera y los partidos políticos lo saben. Estamos en campaña y hoy todos los partidos (salvo Vox) han sacado hoy sus cañas para pescar al votante indeciso. Hoy no hace falta recorrer la provincia en una lenta agonía, pueblo a pueblo, casa a casa, para predicar el mensaje. Hoy son los votantes los que vienen y los partidos sacan sus mejores viandas para convencerles.

El paseo, como casi todo en Soria, comienza en la plaza Herradores. Allí el PP tiene instalado el tenderete más completo; globos, mecheros, abanicos y el producto estrella para hoy; flores. Pequeñas macetas que se acaban en un abrir y cerrar de ojos. Allí están todos, Yolanda de Gregorio y su lista, el diputado electo Tomás Cabezón, el senador Gerardo Martínez, el número 1 a los Cortes Jesús Peregrina…. ¿Quién dijo que el PP estaba dividido?

Junto con Estela Navascue presenta las propuestas deportivas de los populares; la creación de un nuevo campus deportivo en terrenos a ceder por Adif, un instituto municipal del deporte, la rebaja de las tasas deportivas para numerosos colectivos, un camping de deporte acuático en la fábrica de harinas… ¡Más deporte!

Este junta letras decide avanzar por el `tontódromo´. Apenas 20 metros y allí está la carpa de Ciudadanos y un Jesús de Lózar que no para de saludar paseantes mientras responde a las preguntas. “Tratar a los diferentes diferente” promete el candidato naranja que propone dejar de pensar en Soria como una ciudad y hacerlo como un área metropolitana impulsando los polígonos de Garray o Golmayo.

Continuando Collado arriba el stand de los socialistas llama la atención por su música de Los Gandules. Frente al Banco de España, ¿casualidad?, los socialistas propaganda electoral, chapas, caramelos ¡y migas! Todo el equipo municipal pulula por allí, salvo el alcalde y Rey, mientras esperan la venida del candidato autonómico; Luis Tudanca. El candidato a las Cortes cerrará el día en la sala noble de la Audiencia para envidia de la oposición que denuncia que a ellos no se les ofrece ese especio.

Con el estómago contento el último tramo del collado se ve de otra manera. Dos aparatosas bicicletas electorales, si es que existe ese concepto, nos anuncian que será lo próximo que nos vamos a encontrar. La plaza de la Tarta se convierte en símbolo. A un lado; Soria en común, al otro; Podemos. La izquierda, siempre tan junta y tan separada. Los de Soria en común se quejan del marcaje de la junta electoral y los socialistas les recuerdan que fueron ellos los que denunciaron una visita a una cuadrilla.

La mesa más humilde de todas es la de la PPSO. Allí, junto a los folletos y caramelos, José Antonio de Miguel acompaña a la candidata a la capital Ana Fernández. Al `Cabanillas´ se le acumula el trabajo; feria, elecciones, otra feria, otras elecciones, zarrón... y todo ello mirando al cielo. Estoy decidido a acabar el Collado, pero bajo a la plaza Mayor con miedo de encontrarme una mesa de los castillanistas o de los amigos de Puigdemont. Afortunadamente la plaza Mayor está limpia. Solo las fotos deportivas del On Photo que en una jornada como hoy se agradecen especialmente.

La jornada se alarga pasadas las 14:00 horas y los políticos merodean en grupos la plaza Herradores en búsqueda de una cara amiga a la que recordarle lo importante que es ir a votar el domingo 26. Y votar por él, claro. Quien más quien menos ha podido ser hoy convidado a un par de cañas y un trozo de torrezno mientras explicaba al político de turno la vital importancia de cambiar no sé qué ley o las imperiosas necesidades de su pueblo. Candidatos municipales, no solo a la capital, novatos en las listas, deportista metidos a políticos y candidatos autonómicos de paseo por Soria. Palpar la realidad, lo definen los expertos en marketing político. Un jueves de campaña en Soria.