La décimo octava edición de la Feria Tradicional de Almarza, inagurada por los directivos y jugadores del club de fútbol Piqueras, ha reunido a miles de personas, en una cita que, como ha dicho la alcaldesa Ascensión Pérez, va a más, y supone una reivindicación de Almarza, de su comarca, del medio rural y de la provincia de Soria.
Este año, por primera vez, se ha realizado una recreación de la actividad trashumante de la zona, con ganado vacuno, gracias a la colaboración de la Cuadra Antares y los Amigos de La Saca. Medio centenar de puestos de artesanía, alfarería, cestería, cencerros y numerosos productos de alimentación procedentes de Soria, Castilla y León, La Rioja, Navarra y País Vasco han llenado las calles de Almarza. Tampoco han faltado talleres de oficios, como el de hilanderas o alfarería. También ha habido música folk, gaiteros, o se ha podido ver el trabajo de tallado de madera con motosierra.
Por supuesto, los numerosos visitantes, procedentes de Soria, las provincias vecinas y de otros lugares de España, han podido degustar rosquillas y migas.