¿Son los implantes dentales para toda la vida?

Los implantes dentales no son un bien de consumo, sino un dispositivo médico, que requiere cuidados y atención. Debemos concienciar a la población de que existen alternativas, y que los implantes dentales no siempre son la mejor solución ante la pérdida de un diente. Se debe intentar conservar los propios dientes.

Aunque el uso de implantes se considera un tratamiento seguro para restaurar dientes perdidos, a lo largo del tiempo pueden surgir complicaciones que, si no son tratadas, pueden comprometer la función y eventualmente resultar en la pérdida del implante y la prótesis dental.

Estudios recientes demuestran que la incidencia de complicaciones es más frecuente de lo que pensábamos. Los datos de éxito de los implantes a corto plazo (5 años) siguen confirmando que su uso es altamente eficaz. Sin embargo, con el tiempo y sobre todo en pacientes sin medidas preventivas regladas, un 25% de los implantes sufre infecciones en los tejidos que lo rodean tras más de 10 años.

La clave está en la planificación y control previo de los factores de riesgo (tener enfermedades de la encía, diabetes, el tabaquismo…). Primer mandamiento: en encías enfermas no entran implantes.

Segundo mandamiento: cuidados mínimos. Un implante dental puede ser para toda la vida, pero solo si se cuida correctamente. Le recomiendo cepillar sus dientes e implantes al menos dos veces al día, no fumar, y visitar al dentista al menos dos veces al año. Sus implantes lo valen. La detención temprana de las infecciones periimplantarias permite un tratamiento muy sencillo y eficaz.

El éxito del tratamiento con implantes es una responsabilidad compartida entre el paciente y el dentista que lo trata y mantiene. Por eso, aconsejo que se informe sobre el profesional que le trata, el modelo y marca de implante y no confíe en publicidades engañosas y en descuentos que pueden repercutir negativamente en su salud.