La rebeldía de Moha ante el Bilbao Athletic da un empate (2-2) al Numancia en la sexta probatura

Luces, las de Moha, y sombras, tras una primera mitad trastabillada y poco fluida, en la sexta probatura del CD Numancia esta pretemporada (2-2). Los de Carrión reaccionaron por partida doble a los dos tantos del Bilbao Athletic. Los cachorros de Lezama pusieron en serios apuros al Numancia, reforzados en una primera mitad tenue. Casi se la pega el cuadro castellano, rescatado por la veteranía y la juventud de Marc Mateu y Moha, respectivamente.

Justo un año después, el CD Numancia ocupaba nuevamente todo el espacio de La Arquilla-Alberto Vitoria de Ágreda. Esta vez con Luis Carrión en la sala de mandos, el bloque numantino volvía a hacer acto de presencia en la Villa de las Tres Culturas, algo que ya sucedió el agosto pasado, cuando el Numancia y el Real Madrid Castilla miraron al cielo para regalarle un choque al ya fallecido Alberto Vitoria, natural de Ágreda y futbolista de la Casa Blanca.

El Numancia pagó caro un inicio tan dubitativo. Toni Salado, en el 6', le comió la tostada a la zaga rojilla a la salida de un saque de esquina. Ese certero cabezazo suponía el 0-1 a las primeras de cambio.

Tímidamente, el cuadro de Carrión empezó a someter al Bilbao Athletic en La Arquilla, mostrándole ligeramente su superioridad. Sobre el 16', la apertura de Gus Ledes a Nacho en un libre directo sorprendió a una zaga bilbaína desprevenida. Nacho se metió hacia adentro y probó por primera vez al arquero vasco.

Finalmente, un destello del Numancia igualó el luminoso, cuando más estables estaban los rojillos sobre el verde. En el 24', los sorianos replicaron de la misma forma con la que el Bilbao Athletic se avanzó, desde la esquina. La botó Oyarzun y la cabeceó Guillermo (1-1).

Poco duró esa reacción soriana, pues en el 25', se produjo 1-2, nuevamente a balón parado. Accidente para el Numancia, al que le entró una pájara: Gus Ledes la regalaba en el área, despejando mal, y Ewan Roy sentenciaba a Barrio.

Atrás concedía demasiado el Numancia, donde se mostraba excesivamente blando. Y a pesar de que Ledes proponía y salía con el balón jugado en la medular, los de Carrión no fluían en la zona de creación.

Una pérdida en el campo defendido por el Bilbao Athletic a punto estuvo de suponer el 3-1. El balón pegado desde la frontal fue blocado por Barrio. El Numancia se emplazaba con la reacción definitiva, o no, en la segunda mitad.

Moha revoluciona al Numancia

Raudo y veloz por la diestra, Nacho movilizó al Numancia en la reanudación. El conjunto soriano tocaba al primer toque, más rápido que en el primer acto. Aquello desconcertaba a los cachorros, corriendo permanentemente detrás del Numancia.

El juego de las sillas. Mateu y Moha salían al rescate de un Numancia que había mejorado sus prestaciones en la segunda mitad. Esa mejor versión rojilla encontraba su punto álgido en los extremos, además de menearla con una mayor precisión, otro punto a favor de los sorianos.

Mina de joyas por el extremo diestro, desde donde Moha volvía loco al Bilbao Athletic. En una carrera del canterano, cuando le ganó la espalda al lateral, este puso un pase de la muerte en el 68'. La ausencia en el corazón de un delantero privó del 2-2 al Numancia. Marc Mateu también lo acarició en el 75' después de otro buen servicio de Moha.

En el 76', dejada de Moha en el balcón del área y Nacho, de primeras, volvía a rondar el 2-2 con un remate seco. Se producían los mejores minutos del Numancia sobre el verde agredeño.

Frenaron en seco a Mateu en el 81’, tan en seco que se señaló penalti. Guillermo, desde los 11, metros dio por buena la rebeldía de Moha (2-2).