El Numancia es el colista de Segunda. Soria jamás lo había presenciado

Sean todos bienvenidos a un área totalmente desconocida por la parte que le concierne al Club Deportivo Numancia. En 23 temporadas, las acumuladas por la entidad rojilla en el Fútbol Profesional, el club soriano jamás había ocupado la posición de farolillo rojo en Segunda división. Ayer, en el Heliodoro Rodríguez López (3-2), el Numancia cayó en lo más profundo del descenso desde su acceso a la profesionalizada división de plata, acontecido en la temporada 1997-98. Lo nunca visto en Soria, el Numancia ya sabe lo que se siente al ser colista.

Los 21 clubes restantes de Segunda división suman al menos un punto en sus respectivas cuentas. Todos, menos el Numancia, que no se ha llevado nada a la boca y, además, ocupa el primer vagón de la cola. Este aspecto resulta inusual en Segunda, en Soria y en Los Pajaritos, ya que el Numancia no es un habitual en estos lares. En la segunda jornada del campeonato, con la derrota ante el Tenerife (3-2) en el Heliodoro Rodríguez López, el club soriano pone rumbo, con 0 puntos, a lo desconocido: a la vigésimo segunda plaza de Segunda. La luz roja del farolillo ciega al conjunto de Carrión, que en 19 cursos en Segunda nunca había sufrido tal condición en sus carnes.

19 campañas en Segunda dan para mucho, aunque al Numancia nunca le había dado por bucear hasta establecerse en la posición de colista. El pésimo arranque –dos derrotas seguidas– lastima al Numancia, que no pasaba por algo igual desde la campaña 2014-15. Aquel conjunto, gestionado por Anquela, cedió dos derrotas consecutivas contra el Sporting de Gijón en Los Pajaritos y ante el Betis en el Villamarín.

En 798 encuentros, los que ha disputado el contemporáneo Numancia en Segunda, el cuadro rojillo ha caído al pozo unas 43 veces, aproximadamente, durante el transcurso de las mismas temporadas. Lo más cerca que ha estado de la última posición se traduce en un vigésimo primer lugar momentáneo. Es decir, la penúltima plaza de la clasificación.

El Numancia acumulaba dos temporadas enteras sin pisar el descenso en ningún momento de la fase regular. La entidad soriana no es, ni mucho menos, una sospechosa bajo las llamas del infierno.

Bien es cierto que hay tiempo para que la reacción descongele definitivamente al Numancia y le haga abandonar el farolillo rojo y el mismo descenso, pero una nueva derrota ante el Mirandés (este sábado a las 18:00 horas en Los Pajaritos) llevaría al Numancia a repetir una jornada más en ese aciago lugar, y para una entidad que se ha mostrado ciertamente regular en su trayectoria clasificatoria, dos farolillos rojos serían demasiados.