Alcohólicos Anómimos cumple una década en Soria
En el colectivo inciden en que es preciso "aceptar la responsabilidad de ayudar a otros" con esta dificultad y animan a continuar "acudiendo a las reuniones del grupo".
El Grupo Soria Alcohólicos Anónimos ha querido con una misiva al director recordar la andadura que el colectivo lleva andando caminando hace diez años. Una experiencia en la que el compartir el problema con otros ayuda a mantenerse sobrio cada día, al igual que admitir y aceptar la "responsabilidad" de apoyar a otros que viven y sufren esta dificultad.
La carta es como sigue:
"Una mañana de septiembre una persona de Soria, desesperada por sus problemas con el alcohol, llamó al número de teléfono de Alcohólicos Anónimos (AA). Esa misma tarde un miembro de AA le relató su experiencia con la enfermedad y su propia recuperación a través de los doce pasos de AA. Ambos formaron hace ahora diez años el Grupo Soria de Alcohólicos Anónimos y permanecen sobrios desde entonces. Compartir con otros nuestro problema es parte fundamental del programa de recuperación. Desde entonces muchos han acudido al grupo en busca de ayuda para su problema. Algunos han entendido los beneficios y la importancia que para su propia recuperación personal tiene el aceptar la responsabilidad de ayudar a otros alcohólicos y continúan acudiendo a las reuniones del grupo; otros al menos obtuvieron información de la gravedad del alcoholismo y los menos afortunados nunca lograron comprender la condición fatal en que se hallaban. Asimismo, afectados de manera indirecta supieron de la enfermedad que sus parientes o amigos padecían. La comunidad de Alcohólicos Anónimos está al servicio del alcohólico que todavía sufre.
Algunos llegaron a saber de la existencia del grupo a través de la página web alcoholicos-anonimos.org, pero muchos más lo hicieron gracias a los medios de comunicación sorianos que informan sobre las actividades del grupo, a los médicos de los centros de salud e instituciones sanitarias que conocen e informan de nuestra solución, a la Iglesia a través de sus parroquias, a policías y guardia civil, personal de instituciones penitenciarias que están en contacto directo con las consecuencias de tan grave enfermedad. Hoy queremos dirigirnos a todos ellos para expresarles nuestro más sentido agradecimiento por su colaboración y ayuda".