Mirando “siempre hacia adelante”, el cuadro numantino no renuncia a dañar la moral del conjunto asturiano, el cual “ha mejorado” con Javier Rozada sentando en el banquillo. En el Principado, con atrevimiento: “trabajar, correr y tener personalidad”.
En este periodo temporal del curso, el CD Numancia se ha vuelto fiable en la nueva Segunda 2019-20. Presenta garantías, validadas con cuatro empates y tres victorias (todas como local). Recurriendo al "hambre", en la que insiste Luis Carrión, técnico numantino, todas las semanas, el club rojillo buscará este domingo (16:00h) seguir enchufado a su gratificante situación. La primera victoria a domicilio, en el Carlos Tartiere ante un Oviedo que "ha cambiado con Javier Rozada", aportaría un plus, una bola extra, a un Numancia que se encuentra peleando ahora mismo por hacerse un hueco en los play-off. Para ello, valentía y atrevimiento; Carrión recurre a estos términos a menudo. El Numancia, a tope de power en el Principado.
Carrión aseguró ayer en la rueda de prensa previa al Real Oviedo-Numancia que los rojillos van “con buen ánimo” al Carlos Tartiere y “con la intención de conseguir tres puntos ante un rival complicado que ha mejorado en estas últimas semanas”. El CD Numancia “está capacitado para ganar” en Asturias. Azuzando arriba, el combinado rojillo “ha de ir a por todo haciendo un buen fútbol”. El Numancia ha de mostrar “personalidad”, no perdiendo de vista “unos mínimos: dejárselo todo, tener hambre y querer tener 16 puntos”. Carrión tan solo cuenta con las bajas de Admonio y Curro, sancionado tras ver la roja directa en el Numancia-Fuenlabrada.
Con Javier Rozada en el banquillo ovetense, sustituyendo a Serio Egea, el Real Oviedo ha sumado una derrota, dos empates y una última victoria la pasada jornada, la primera del nuevo curso. Es decir, los asturianos han ido de menos a más con Rozada. Carrión espera a un Oviedo “intenso, competitivo” y con las ideas claras, “teniendo claro lo que quiere”. El barcelonés reconoció que el bloque azulón “ha mejorado” con Rozada.
Antes de que se produjese ayer el triunfo del Albacete sobre el Alcorcón (0-1), el Numancia era equipo de Promoción. “Duermo bien. Lo digo siempre: ni cuando estamos en una situación cómoda me vengo arriba, ni cuando hemos estado mal he estado hundido”, analizó Carrión, que pide paciencia: “Es pronto”, señaló. El técnico de la Ciudad Condal sabe que “los equipos que tienen alma son los que están arriba”. Ante el Fuenlabrada, el Numancia tiró “de casta”. El romanticismo de Carrión pasa por que su Numancia “mire siempre hacia adelante”, a base de trabajar, correr y “tener personalidad con balón y sin él”. El entrenador catalán pasa del “conformismo”, no casa con él. Si lo intentas y “lo crees de verdad”, todo puede pasar…
Después de acumular partido tras partido en un septiembre lleno de ritmo, “somos uno de los equipos que más corre, con sentido e intentando presionar arriba. Creo que el equipo está bien. Puede entrar cualquiera porque hay mucha igualdad”, explicó el de la Ciudad Condal, quien podría introducir algún cambio en el once rojillo mañana por la tarde en Oviedo: alguno puede “estar cansando”. A Carrión le ocurre a menudo, “sabe qué hacer, pero no con quién jugar”.
Carrión conoce a Curro Sánchez y no puede ser “objetivo” porque sabe que su futbolista no fue “con maldad” a la hora de pisar a Iván Salvador; esa acción le costó la roja, después de ser revisada por el VAR. El técnico barcelonés no entra a criticar el VAR: “Hay que aceptar estas situaciones. Lo ven al milímetro. A veces nos ayudará y a veces no. Estoy muy a favor del VAR, de los árbitros y de dejarlos en paz”, contó.