Soria busca mano de obra

Argentina (5), Colombia (4), Venezuela (3) o Marruecos (1). Esas son las procedencias de algunos de los trabajadores que han respondido a la alerta de demanda de personal lanzada por los empresarios sorianos. La Subdelegación del Gobierno en la provincia ha recibido 17 mensajes de personas interesadas en venir a trabajar a Soria. “Están buscando un cambio en sus vidas y piden información”, informa el subdelegado Miguel Latorre. “Son personas de edad media, entre 35 y 50 años, que buscan trasladarse con sus familias” y a los que se les remite toda la información en materia de inmigración.

La alerta, “una vieja reivindicación de los empresarios” según señala Alberto Santamaría, fue materializada en un informe de la Cámara de Comercio de Soria publicada en febrero de este mismo año. Según esos datos 2 de cada 3 grandes empresas sorianas prevén ampliar su plantilla en los próximos años y se encuentran con un problema en el horizonte: la falta de profesionales en Soria.

A la despoblación se suma una tasa de paro cercana al 7,5% y una fuga de talentos. ¿Resultados? Las empresas tienen serias dificultades para encontrar perfiles en sectores como el mantenimiento o el transporte. Otros profesionales como comerciales, electricistas, electromecánicos, operadores de fábrica, farmacia o técnico de laboratorio industrial tampoco abundan en el mercado laboral soriano.

Santamaría, presidente de la Cámara, reconoce que la falta perspectivas de promoción laboral dificulta que ciertos perfiles nacionales quieran venir a Soria. Por ello, es más sencillo encontrar estos trabajadores de fuera de España ya que sienten que en la provincia pueden lograr “un significativo aumento de su calidad de vida”.

Para explorar la búsqueda de mano de obra en el extranjero el director general de Migraciones, José Alarcón, visitó Soria en septiembre. Los empresarios le pidieron medidas excepcionales dentro de los planes con los que cuenta el Ministerio de Trabajo para un territorio la situación extrema de Soria. “Los empresarios prefieren el traslado de la unidad familiar pues da más estabilidad, al empleo y a la población”, señala Santamaría.

Proyecto piloto

Los empresarios, impulsados por la Cámara de Comercio, pidieron que se estudiara la posibilidad de un proyecto piloto en Soria que abarcara 3 asuntos peliagudos: la falta de personal, la despoblación y la inmigración ilegal. “Si se analizan perfiles tanto técnicos como sociales no veo porque no se pueden legalizar la situación de estas personas en base a un contrato de trabajo”, propone Santamaría.

El impulso a este tipo de medidas no es sencillo, y menos con un gobierno en funciones, pero Santamaría insiste: “Somos un sitio pequeño donde podríamos probarlo” y, explica que “en las contrataciones en origen nadie sabe muy lo que está firmando”.

El S.O.S. del mercado laboral soriano logró alcance nacional y se han multiplicado los interesados que se han puesto en contacto no solo con el Gobierno sino también con la Cámara. Un aumento “significativo de llamadas y curriculum” de extranjeros y “también de sorianos a los que no les importaría volver si tienen una buena oportunidad laboral”, señala Santamaría. Pese al interés, Latorre pone pausa. “Son cuestiones a resolver en la cámara legislativa, está muy reglamentado”, avisa y señala que “cada parte tiene su punto de vista”, en alusión a empresarios, trabajadores y administración.

Los puestos de trabajo, cerca de 2.000 en los próximos 3 años están ahí. Las necesidades del mercado laboral soriano son evidentes y la situación de extrema necesidad de miles de personas en territorio nacional también. El presidente de la Cámara alerta de una situación que ha visto con sus propios ojos: “Los inmigrantes irregulares viven de una manera inhumana bajo el control de las mafias”. Ahora “falta mojarse”. Santamaría lo tiene claro: “Soria es un sitio tan pequeño que es ideal para hacer un programa piloto con 4 o 5 mil personas. Algo que para un Gobierno central no supone nada y para Soria sería fundamental”.