En un fin de semana frío y gris, con Bárbara y Fabien de fondo, dos derbis sorianos para capear el adverso temporal

La decimoctava jornada en el Grupo A de la Primera división Regional de Aficionados dejó dos derbis sorianos en la provincia: el San José-Uxama finalizó cero a cero y el Calasanz se impuso al San Esteban en el Municipal ribereño (0-2). Por el mismo lado, el CD Tardelcuende cayó por la mínima en el Abel Antón ante el Diocesanos (0-1).

CD San José-Uxama (0-0)

El primero de los derbis sorianos se tuvo que desplazar a la capital de Soria. Debido a un terreno de juego completamente anegado, el CD San José-Uxama se disputó el sábado a las 15:30 horas en el Polideportivo San Andrés.

El choque entre sorianos, quienes cohabitan con los ‘grandes’ en la zona puntera de la Preferente, finalizó cero a cero. El cuadro colegial controló el encuentro, que brilló por la ausencia de ocasiones manifiestas de gol y la poca vistosidad en cuanto a fútbol se refiere. En el 65’, Modrego vio cómo ‘Alte’ dejaba al San José con uno menos: roja a y a la calle.

CD Tardelcuende-Diocesanos (0-1)

Gracias a su triunfo por la mínima en el Polideportivo Abel Antón (0-1), el Diocesanos supera al Sporting Uxama en la tabla y se convierte en el nuevo líder de la Preferente. En el 3’, Mario Hidalgo registró el único tanto de la tarde. De esta manera, el cuadro pizorrero, dirigido por Mario Salvachúa, se asoma a la zona de descenso: es decimocuarto con 14 puntos.

CD San Esteban- CD Calasanz (0-2)

Después de dos triunfos consecutivos, el San Esteban de Dani Frías puso fin a su racha laureada en el Municipal de San Esteban de Gormaz. Lo hizo a costa de un soriano: el CD Calasanz se supera en el derbi provincial y reduce sus penurias. Se sitúa con 13 puntos y ve un poco más factible lo de salvar la categoría. La confianza sobre Antonio Fernández, míster de la escuadra blanquiazul, se mantiene intacta.

El CD Calasanz ganó su cuarto partido de Liga en un Municipal empapado, por el que corría un fuerte viento. Bárbara y Fabien condicionaron lo que ocurrió durante los 90 minutos. Dominó la primera mitad el San Esteban, que se acercaba más que sus vecinos, pero sin rematar la faena; solo un larguero hizo temblar a Mínguez. Por su parte, el Calasanz lo intentaba mediante el contraataque.

El conjunto de Antonio Fernández le cambió la dinámica al partido en la reanudación, lavando su imagen. Se rompía ese ‘de tú a tú’: en el 49’, Cascante cruzaba perfectamente una asistencia filtrada a las espaldas de la zaga ribereña (0-1). Ese gol espoleó al Calsanz, que secó al San Esteban desde los 11 metros, ya que Mínguez desbarató una pena máxima a favor de los locales.

A base de lucha, brega y pelea sana, el San Esteban intentó igualar la contienda, pero nada más lejos de la realidad, pues Dani Tello estableció la sentencia en un contragolpe (0-2). El derbi se decidió por detalles.