La consejera de Educación comparece en las Cortes de Castilla y León para explicar la gestión su departamento frente a la crisis provocada por la COVID-19. Rocío Lucas reitera el reconocimiento y la felicitación a toda la comunidad educativa por su adaptación a la docencia no presencial
La consejera de Educación, la soriana Rocío Lucas, ha comparecido esta mañana en la Comisión de Educación de las Cortes de Castilla y León para explicar cómo se ha gestionado, desde su departamento, la crisis de la COVID-19. Todas las decisiones han respondido a dos exigencias: garantizar la seguridad de la comunidad educativa y velar por el derecho a la educación.
En su repaso de la actuaciones llevadas a cabo, la titular de Educación ha reconocido en el Parlamento autonómico ciertos problemas de acceso a la plataforma digital los primeros días. “Algo lógico, si se tiene en cuenta que, de la noche a la mañana, unas herramientas dimensionadas para un tráfico de datos determinado, incrementan de forma exponencial su uso”, ha señalado Lucas. Concretamente, el Portal de Educación - www.educa.jcyl.es -vio triplicar los accesos de un día lectivo para otro, de tres millones de visitas semanales, a nueve millones.
Esas dificultades iniciales, según la consejera, quedaron solucionadas tras los primeros días gracias a la labor coordinada de las consejerías de Educación y de Fomento y Medio Ambiente. Así, el Portal de Educación ha permitido dar continuidad a un curso interrumpido por una pandemia sin precedentes.
En estos momentos funcionan 774 aulas virtuales, con 850.000 accesos semanales y 296.000 usuarios potenciales, entre alumnos y profesores. Además, todos los centros públicos disponen de las herramientas de Microsoft Office 365 y el uso que la comunidad educativa está haciendo de ellas está siendo masivo, según la propia empresa.
Desde el mismo Portal se accede al Centro de Recursos On Line (CROL), donde docentes y alumnos de todas las etapas no universitarias, encuentran multitud de temáticas curriculares, materiales multimedia, o recursos inclusivos, entre otros. En este tiempo de confinamiento, se han incluido en el CROL tantos recursos como en un año normal completo.
El resultado de todas estas actuaciones, ha sentenciado Rocío Lucas, es que “la educación no presencial está funcionando de forma satisfactoria a pesar de las dificultades”. Gran parte de este buen resultado se debe a que la Consejería de Educación lleva años apostando por las nuevas tecnologías y la competencia digital del profesorado, algo en lo que Castilla y León fue pionera.
Brecha digital
“No dejar a nadie atrás” ha sido y está siendo una premisa de la Junta de Castilla y León en esta pandemia. Así lo ha reconocido la consejera de Educación ante los parlamentarios autonómicos. Por eso, los equipos directivos y los profesores han identificado a todos aquellos alumnos que tuvieran problemas de acceso a la educación on line. Un recuento que ha finalizado con 9.900 estudiantes, aproximadamente el 3,5 por ciento del total. Todos han recibido una tarjeta SIM para poder seguir aprendiendo a distancia.
Asimismo, la enseñanza ha entrado a los hogares por otra vía: la televisión. Desde el día 30 de marzo Castilla y León Televisión emite contenidos educativos sobre distintas materias para todas las etapas.
Tercer trimestre
La Junta de Castilla y León ha querido buscar soluciones educativas a esta pandemia en colaboración con el resto de comunidades autónomas y con el Ministerio de Educación y Formacion Profesional.
En este sentido, tal y como ha explicado la titular de Educación en las Cortes, la primera de las decisiones fue no dar el curso por perdido y continuar avanzando en competencias clave. Algo que era prioritario para un sistema “serio y exigente” como el de Castilla y León.
Asimismo, y para no perjudicar a nadie, el tercer trimestre se adaptó a lo excepcional de la situación: “lo realizado durante este último trimestre podrá sumar, beneficiar al alumno, pero nunca perjudicarle”, ha recordado Lucas.
Más complejas eran las soluciones en la Formación Profesional y las enseñanzas de idiomas, donde también la Consejería ha dado instrucciones para flexibilizar al máximo los módulos prácticos y la evaluación.
EBAU y enseñanzas universitarias
La prueba de acceso a la universidad también sufrirá cambios. En total consonancia con el Ministerio de Universidades, Castilla y León cambió las fechas de sus exámenes, que se celebrarán del 1 al 3 de julio en su convocatoria ordinaria, y del 10 al 12 de septiembre en la extraordinaria.
El tipo de prueba también se ha modificado para adaptarse a la situación. La Consejería de Educación ha trabajado junto con las universidades para aprobar un modelo de examen “en el que el alumno pueda elegir contenidos adquiridos antes de que se suspendieran las clases presenciales”, ha señalado Lucas.
En el ámbito universitario las soluciones se han adoptado respetando el principio básico de la autonomía universitaria, pero con un trabajo permanente y coordinado con las universidades de Castilla y León. Y el resultado es que, según ha señalado la propia consejera, la docencia virtual se está desarrollando “satisfactoriamente, dentro de las dificultades que en muchos casos se plantean”.
Investigación
El tejido investigador de Castilla y León está siendo clave en esta pandemia. Las universidades y centros públicos “se están mostrando muy activos y han presentado varios proyectos a la convocatoria nacional del Instituto de Salud Carlos III” ha explicado en sede parlamentaria la consejera de Educación.
Para los proyectos que se queden fuera de esa carrera a pesar de obtener buena puntuación, la Junta de Castilla y León prepara ayudas por valor de 2,4 millones de euros. Se trata de proyectos de investigación destinados a buscar soluciones a la pandemia provocada por la COVID-19.
Asimismo, la Consejería de Educación, ha informado Rocío Lucas, ha autorizado las prórrogas de todos los contratos de personal investigador que fueran a terminar durante el estado de alarma. Lo que se traduce en 168 contratos entre las cuatro universidades públicas de la Comunidad.
La labor de esta Consejería, junto con la de Sanidad y el Ministerio de Ciencia e Innovación, han conseguido agilizar los trámites para que los laboratorios de las universidades puedan realizar test diagnósticos PCR.
Además, las universidades han puesto a disposición de la autoridad sanitaria todos los medios con los que cuentan en las residencias universitarias de los diferentes campus. Así, el Colegio Fonseca de Salamanca ha acogido pacientes leves y la Universidad de Valladolid ha cedido el mobiliario para acondicionar la Feria de Muestras como hospital de campaña.
Paralización de procedimientos administrativos
El estado de alarma paralizó todos los procedimientos administrativos, con consecuencias directas para las oposiciones que ya estaban convocadas para el 2020. Durante su intervención, Lucas ha defendido la medida de aplazar dicha convocatoria al 2021. Una decisión que se ha tomado junto con las organizaciones sindicales de Castilla y León y que garantizará las 1.401 plazas convocadas.
Otro de los procedimientos paralizados es el de admisión de alumnos. La titular de Educación ha anunciado que la orden que regula el nuevo proceso se publicará en los próximos días y reitera el mensaje de tranquilidad a las familias, ya que tendrán tiempo suficiente para registrar las solicitudes.
Vuelta a las aulas
Respecto a la vuelta a las aulas, Rocío Lucas ha reconocido que no hay información certera en este momento de un proceso que, por otro lado, tampoco depende de la autoridad educativa. La consejera de Educación ha recordado que, en cualquier caso, es algo que debería hacerse con todas las garantías sanitarias y que, en la situación sanitaria actual, la vuelta a las aulas antes de fin de curso no parece factible.
La comparecencia puede ser leída íntegramente en el archivo adjunto bajo estas líneas.