El poderoso paisaje de la Laguna Negra es el hogar de numerosas leyendas tradicionales reforzadas por la pluma de Antonio Machado. ¿Qué oscuro secreto guardan las profundidades de la Laguna Negra?
El sorprendente y bellísimo paraje de la Laguna Negra de Soria, un pequeño lago de origen glaciar en la sierra de Urbión, resguardado en unos poderosos paredones de roca, rodeados de hayas y retorcidos pinos -no pocos centenarios-, ofrecen una estampa llena de misterio y de magia, que ha generado numerosas leyendas y relatos de la tradición oral. Ni el propio poeta Antonio Machado pudo sucumbir a su llamada.
Existe un misterio, una idea que se transmite..., que es que las aguas oscuras de la Laguna Negra no tienen fondo; o que la Laguna esconde y oculta numerosos y tremendos secretos.
“En la laguna sin fondo /al padre muerto arrojaron", dice Machado en su leyenda y romance de la Tierra de Alvargonzález. Sin embargo, la realidad es que la profundidad de la laguna no sobrepasa los 10 metros.
Pero, cuidado, no hay que desdeñar las leyendas y las tradiciones orales. Y Machado conto, en su Campos de Castilla, que bajo el agua de la Laguna Negra están Alvargonzález y sus dos hijos con “sangre de Caín”, que no dudaron en asesinar al padre. Cuando te encuentres frente a la Laguna Negra, cuando te absorba misteriosamente el paisaje, recuerda estos versos:
"Llegaron los asesinos
hasta la Laguna Negra,
agua transparente y muda
que enorme muro de piedra,
donde los buitres anidan y el eco duerme, rodea;
agua clara donde beben
las águilas de la sierra,
donde el jabalí del monte
y el ciervo y el corzo abrevan;
agua pura y silenciosa
que copia cosas eternas
agua impasible que guarda
en su seno las estrellas.
¡Padre!, gritaron; al fondo
de la laguna serena
cayeron, y el eco ¡padre!
repitió de peña en peña.