El Juzgado ha ratificado la Orden de la Consejería de Sanidad publicada hoy y ya en vigor, aunque ha reducido a siete días el plazo inicial de vigencia de las actuaciones de contención epidemiológica adoptadas en ese municipio burgalés.
Los Servicios Jurídicos de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos han recibido hoy el Auto del Juzgado N.º 1 de lo Contencioso-Administrativo de la capital burgalesa, por el que se comunica la ratificación íntegra de las medidas sanitarias preventivas adoptadas en la Orden SAN/752/2020, de 6 de agosto, para la contención del COVID-19 en el municipio de Aranda de Duero, en Burgos.
Dicha Orden, ya en vigor, ha sido publicada hoy, 7 de agosto, en el Boletín Oficial de la Comunidad y estaba pendiente de la ratificación judicial ahora producida.
En su Auto, el juez ratifica las medidas previstas en su totalidad, pero para un plazo inicial de siete días, no catorce como inicialmente expresaba la Orden, indicando, asimismo, la posibilidad de prorrogar su vigencia; para ello, dos días antes de la finalización del periodo ahora autorizado ha de presentarse una nueva petición informada sobre la situación epidemiológica que justifique un nuevo plazo. Antes de la conclusión de los siete días iniciales, el Juzgado deberá decidir o no la continuidad de las medidas de contención sanitarias.
Todos los ciudadanos han de colaborar activamente en el cumplimiento de esta Orden, de manera que su incumplimiento individualizado podrá constituir infracción administrativa sancionable según establece el Decreto-ley 7/2020, por el que se establece el régimen sancionador específico por el incumplimiento de las medidas de prevención y contención para afrontar la crisis sanitaria por la pandemia de la COVID-19 en Castilla y León.
Es imprescindible el compromiso y la responsabilidad individuales para con el cumplimiento de estas medidas y de cualquier otra obligación destinada a evitar la transmisión comunitaria y a prevenir la COVID-19, insistiendo en que todos y cada uno de los ciudadanos han de extremar la observancia de las medidas individuales (lavado frecuente de manos, distanciamiento físico interpersonal y uso obligatorio de mascarillas) y colectivas para frenar más contagios por SARS-CoV-2.