El presidente de la Junta de Castilla y León ha destacado que la Carta Magna cumple 42 años recogiendo los valores de la libertad, la igualdad, la solidaridad, la justicia social y el pluralismo político que hacen de España una de las democracias más avanzadas del mundo.
Durante su asistencia al acto conmemorativo del Día de la Constitución que se celebra hoy en el Palacio del Congreso de los Diputados, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha rendido homenaje a todos los españoles que con una abrumadora mayoría apoyaron la Carta Magna del 78 y a toda la generación de políticos de la Transición, quienes con generosidad, valentía y también con audacia, fueron capaces de plasmar en esa Constitución los principios de libertad, igualdad, solidaridad, justicia social y pluralismo político que hacen de España una de las democracias más avanzadas del mundo.
Además, ha destacado que la Constitución de 1978 recoge el modelo de la España de las Autonomías, una herramienta que vino a solucionar uno de los problemas históricos de España, como es el reparto del poder territorial. Según Fernández Mañueco, este modelo “desde la coordinación del Estado director y desde la cercanía de las comunidades autónomas dio solución y respuesta a uno de los problemas más importantes que tenía nuestro país” y sigue siendo una herramienta muy útil para trabajar por la sociedad del bienestar.
Tras recordar que la Constitución fue una norma respaldada por una gran mayoría de los españoles, ha señalado que cualquier iniciativa para reformarla debe hacerse desde el mismo espíritu de consenso entre diferentes con el que se elaboró y también con la misma mayoría con la que fue aprobada y ratificada por el pueblo español.
Por último, ha afirmado que el principal problema que tiene en la actualidad la Carta Magna es precisamente que “esa gran mayoría silenciosa que respalda, que defiende, que respeta y que valora la Constitución de 1978 no seamos capaces de defenderla” frente a los ataques que se producen a las instituciones más importantes de la Nación, o a la propia unidad de la Nación España, siempre desde el respeto a la diversidad y a la pluralidad.