Castilla y León teme que una tercera ola acabe en catástrofe si llega con las UCIs llenas

Cuando se cumplen 300 días de la declaración por parte de la OMS de la pandemia mundial, la situación de la crisis Covid en Castilla y León continúa mejorando, aunque cada vez lo hace de manera más lenta. En las últimas 24 horas se han declarado en Castilla y León 381 positivos por Coronavirus siendo Burgos y Palencia las provincias que peor se encuentran y Aranda de Duero, Miranda de Ebro y Palencia los municipios que más preocupan.

Verónica Casado pide a los ciudadanos ser “muy cuidadosos” para no “echar por la borda” todo el trabajo realizado durante semanas por todos para reducir la incidencia. La consejera de Sanidad de Castilla y León alerta de una tercera ola si en Navidad no se toman en serio las limitaciones. Una tercera ola que se produciría con unas UCI llenas lo que podría llevar al colapso del sistema sanitario, social y económico.

Verónica Casado señala que antes de la pandemia las camas de UCI de Castilla y León nunca tenían más de 120 personas ingresadas a la vez teniendo. Hoy hay 169 pacientes Covid ingresados en las UCI. Hay que destacar que antes de la pandemia los hospitales de la región contaban con 166 camas UCI habilitadas. Además, hay otros 600 pacientes en planta.

Destaca Casado que la media de estancia de los pacientes en la UCI es de 28 días. Es ahí, en las UCIs, donde actualmente se encuentra el “cuello de botella” de esta enfermedad capaz de “bloquear todo el sistema sanitario”. La consejera señala que encarar una nueva ola con más de 100 pacientes en las UCIs supondría un grave riesgo para la sostenibilidad del sistema.

Castilla y León es ahora mismo la decimosegunda comunidad en número de casos, con 190 casos por 100.000 habitantes en 14 días, por debajo de la media nacional. Con todo ha vuelto a destacar que hasta que la incidencia no baje de 25 no se podrá denominar la situación como “controlada”. Y para ello “falta mucho”, reconoce.

Verónica Casado ha señalado que ya se han solicitado a todos los hospitales y áreas de la comunidad que preparen sus planes de contingencia por lo que pueda pasar en las próximas semanas. “Tenemos una reserva estratégica importante de antígenos de segunda generación”, explica Casado quien se muestra en contra de congelar vacaciones a los profesionales sanitarios si hay otras opciones. La Junta ha pedido a sus gerentes que se den vacaciones y descansos durante estos días para que los profesionales sanitarios estén descansados física y anímicamente para una posible tercera ola en la segunda quincena de enero.