La Comisión de Patrimonio Cultural aboga por la eliminación de una de las 32 torres previstas para preservar el entorno y esta construcción islámica.
La rehabilitación de la antigua panera del Monasterio Cisterciense de Santa María de Huerta ha sido autorizada como centro de producción de calor y fábrica de mermeladas, a iniciativa de la Comunidad Cisterciense del convento. La Comisión de Patrimonio Cultural de la provincia ha sometido el visto bueno a las prescripciones de que las bajantes sean de acero corten o similar y que estará pretratado con el fin de evitar manchas por oxidación sobre las fábricas.
También indica la Comisión que el ladrillo manual, que se usará para distinguir la cerca del Siglo XVI de otros paramentos, tendrá que ser similar al empleado en el edificio de las letrinas. Además condiciona a que si las obras planteadas conllevasen remociones del terreno en zonas no alteradas se deberá llevar a cabo el correspondiente Control Arqueológico.
Garantías para la atalaya islámica ‘La Torrejalva’
Aprobadas las garantías para atalaya ‘La Torrejalva’ ante un futuro parque eólico
La Comisión de Patrimonio Cultural aboga por la eliminación de una de las 32 torres previstas.
Este jueves, la Comisión de Patrimonio Cultural ha analizado el informe de los resultados de la prospección arqueológica y el estudio del patrimonio cultural para la Evaluación de Impacto Ambiental del parque eólico ‘El Corpal’, en los términos municipales de Cubo de la Solana, Tejado y Borjabad, promovido por la empresa Capital Energy, y que prevé contar con 32 aerogeneradores. La prospección ha puesto de manifiesto la afección de la instalación a varios elementos de significación histórica y arqueológica, concretamente al entorno de protección y vistas de la atalaya islámica de ‘La Torrejalva’ y a cuatro enclaves donde se ha producido el hallazgo de industria lítica de cronología prehistórica.
Para hacer compatible el proyecto con la protección del Patrimonio cultural se plantean, como medidas correctoras, el estaquillado previo de las zonas donde se han realizado hallazgos arqueológicos; además debe realizarse el control pertinente de los movimientos de tierra que se realicen en los ámbitos de protección de los restos arqueológicos de ‘Reculos’, ‘El Chano’, ‘El Chano II’, ‘Cuestas de Valdemoro’ y ‘Vega Fría’.
Para garantizar la protección de la atalaya islámica se propone que no se debería realizar ningún tipo de obra que cause afección directa en el entorno de protección delimitado en la declaración de Bien de Interés cultural, para lo que sería necesario la eliminación de un aerogenerador y las obras previstas sobre el camino actual.
Además la Comisión indica que se debería estudiar el cambio de ubicación de tres aerogeneradores con el fin de evitar perjuicios indirectos, ya que pueden producir un impacto visual sobre la atalaya que derive en un menoscabo en los valores que la han hecho merecedora del título de BIC.