La comisión Europea ha propuesto un nuevo plan Marshall para el rescate del continente

Es indudable que la situación provocada por el Coronavirus abre una batalla de dos frentes: necesita de una gestión extremadamente planificada para frenar los brotes del virus, a la vez que se intentan contrarrestar los efectos económicos a consecuencia de las restricciones y del distanciamiento social. No cabe duda que la pandemia es un acontecimiento que ha modificado una gran cantidad de aspectos cotidianos de la vida de las personas, así como diversas tendencias económicas y comerciales. En este sentido, recientemente, la Comisión Europea dio a conocer una propuesta para abrir el camino para una pronta recuperación del sistema financiero del viejo continente.

No cabe duda que el COVID-19 llegó en un momento clave para la economía mundial ya que, a pesar de una relativa calma, los especialistas ya habían notado un importante proceso de desaceleración del crecimiento anual. Además de que todos los estímulos que se habían llevado a cabo no estaban dando respuesta. Es decir, el coronavirus sólo vino a acelerar las contracciones económicas del sistema financiero mundial.

Plan europeo de recuperación

El actual sistema capitalista se encuentra sufriendo una crisis de sobreproducción, en donde una gran cantidad de productos y servicios no encuentran salida en el mercado a causa de que un gran porcentaje de la población no se encuentra trabajando a raíz de la paralización. En una sociedad de consumo, cuando se deja de consumir, se comienzan a generar todo tipo de desequilibrios económicos que derivan en una crisis general. Y a pesar del reciente auge de los minicréditos, para reactivar la economía se necesita de la inyección de una gran cantidad de capital.

Esto es lo que pretende la Comisión Europea a través de su plan de recuperación. Se trata de una iniciativa similar al plan Marshall que se llevó a cabo al finalizar la Segunda Guerra Mundial, con la única diferencia es que esta vez no se realizará con dinero estadounidense. Los europeos han propuesto un fondo propio de 750 mil millones de euros, cuyas dos terceras partes se compongan de subsidios y el resto de préstamos. No cabe duda que entre las naciones que se verán más beneficiadas por este fondo se encuentran España e Italia.

En primer lugar, España recibirá un total de 140 mil millones de euros en subsidios y préstamos. Se trata de una magnitud de dinero equiparable al 11% de su Producto Interno Bruto. Cabe destacar que los sectores económicos que tendrán mayor prioridad serán la industria del turismo, el comercio y las energías renovables.

No se debe olvidar que una parte importante del dinero que recibirá España debe ser devuelto a la Comisión Europea bajo ciertas condiciones. Al igual que los minicréditos, los préstamos que se realizarán a través del fondo de recuperación contienen términos y condiciones en materia de intereses y cuotas de pago.

Primer borrador del proyecto de fondo de recuperación

Fue la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, quien desde Bruselas presentó el borrador que ha sido considerado por algunos como un poco conservador. Esto se debe a que las estimaciones más populares ubicaban la propuesta en una cantidad cercana al billón y medio de euros. Estas estimaciones tienen su origen en la destacada caída del PIB anual que se ha registrado en Europa. Sin embargo, a pesar de todas las dificultades económicas, un plan de 750 mil millones es mucho más factible para llegar a un consenso que uno de billón y medio. La propuesta ha sido realizada y es sólo cuestión de tiempo a que todos los países se pongan de acuerdo en aprobar un enorme préstamo o sólo se digne a proporcionar minicréditos a las naciones afectadas.

Posible alza del euro

Durante la crisis sanitaria y económica producida por el coronavirus se ha registrado la muerte de más de 5 millones de personas en todo el mundo, además de los miles de millones de dólares perdidos por la paralización de las actividades. En este terrible contexto, el euro ha sufrido una baja considerable en comparación al dólar. Sin embargo, la puesta en marcha del plan de recuperación podría darle un buen empujón a la moneda en la dirección correcta y poder experimentar un alza. El precio del euro se vería afectado de forma positiva ya que la liquidez monetaria es un medio que fomenta el crecimiento, combate la deflación y aumenta la demanda de productos y servicios.

No cabe duda que dicho crecimiento será determinante para la creación de nuevos empleos y de un nuevo estado de prosperidad en Europa.