Desalojos en el edificio El Mirador

Poco después de las diez de la mañana de este jueves, 13 de mayo, la autoridad judicial ha procedido al desalojo y en su caso a la intervención de 21 viviendas del edificio El Mirador, en la calle Venerable Carabantes de la capital soriana. El procedimiento ha contado con el apoyo de las policías Municipal y Nacional, entre otros.

El procedimiento, que se ha desarrollado según lo previsto, en principio, hacía saltar las alarmas entre los propietarios legales de las viviendas, ya que se ha dado el caso en el que uno de ellos veía cómo los intervinientes, después de haber llamado a su domicilio, y él solicitar unos instantes para abrir la puerta, constataba que estaban tratando acceder a la vivienda. "Aquí han cambiado la cerradura", ha relatado el vecino, quien prefiere estar en el anonimato, transmitiendo así lo que ha podido escuchar al otro lado antes de atender al requerimiento.

Después de abrir, veía que en los dos tramos de escalera, de subida y de bajada, se encontraban, además de varios agentes del orden y de personal administrativo y judicial, -y el perceptivo personal de cerrajería y de seguridad privada- "no menos de siete personas", mientras aseguraba a los actuantes que el inmueble es de su propiedad.

Pese esta insistencia, por parte del personal ejecutivo no daban crédito a estas afirmaciones, ya que constaba en su orden que el piso figuraba en la orden. "En tres ocasiones he tenido que decir que el piso es mío", ha indicado el afectado, que finalmente se veía obligado a mostrar su título de propiedad. "No me quiero imaginar qué habría pasado si llegan a reventarme la puerta", ha reseñado, detallando que a esa, hora el inmueble, habitualmente, no se encuentra ocupado, salvo por su madre, de 92 años, que a esa hora suele estar aún acostada. "No sé el susto que se habría llevado", lamenta.

Una vez aclarada la situación, el afectado daba la voz de alerta a sus convecinos mediante whatsapp ante la posibilidad de que este negligente modo de actuar pudiera repetirse en las distintas propiedades, y consiguientemente, encontrar con sus cerrraduras "reventadas y con el precinto policial" al no estar ellos, en su caso, en el interior.

Cierre de 19 unidades

El amplio operativo ha llevado a cerrar, al menos, 19 de los pisos en cuestión, toda vez que la inmobiliaria anterior, despojada ya de la titularidad, mantuviese aún, en régimen de arrendamiento a distintos inquilinos sin que esta firma, afincada en Guadalajara, se hiciese cargo del pago de los gastos de la comunidad vecinal.

Y más aún, la trístemente recordada compañía constructora, Ratioinver Promociones Inmobiliarias, hacía acto de presencia con quien es, o fue, representante de la misma, para "llevarse algunos de los efectos que tenía en sus oficinas", según ha podido saber este periódico. Un gesto "lamentable" habida cuenta que dicha persona "ha generado este conflicto que venimos arrastrando hace años". La empresa también, y como es sabido, dejó "empantanado" el proyecto 'El Dionsaurio', en Garray.

Por lo demás, decir que el Sareb ha instalado alarmas en todas las viviendas que ahora se encuentran vacías, en previsión de que pudieran ser ocupadas ilegalmente.