La Junta advierte que tendrá que parar las primeras dosis para poder asegurar que se completen las inmunizaciones ya iniciadas. Igea reconoce que la reducción de vacunas que llegan a la comunidad podría afectar especialmente a Soria. “El riesgo es por edades, no por provincias”.
El portavoz de la Junta de Castilla y León avanza lo que va a pasar en los próximos días en la región. “Vamos a vernos obligado a ralentizar nuestro ritmo de vacunación”, señala. Todo por la disminución de dosis que llegan que se suma a la obligación de garantizar las segundas dosis. Unas segundas dosis que, ha llegado a afirmar, “están en peligro”.
Francisco Igea ha señalado que en la segunda quincena de mayo la región ha recibido 150.000 dosis menos que en las mismas semanas de abril. Un “problema matemático” que obliga a poner segundas dosis con 223.000 vacunas a 372.000 personas que ya tienen la primera dosis. “Vamos a tener que parar las primeras dosis”, lamenta mientras reclama al Gobierno por enésima vez más vacunas.
A ello se una el “lío máximo” que ha provocado el Gobierno ofreciendo Pfizer y AstraZeneca a los menores de 60 años que se vacunaron con AstraZeneca lo que provoca que haya que tener vacunas ‘bloqueadas’. “Es un fracaso evidente y debe hacer reflexionar al Gobierno y a la ministra de sanidad”, señala. La mayoría de personas están optando por continuar el proceso con AstraZeneca. Igea considera que esta gestión es mala para el prestigio y la confianza de la población en las instituciones y en el proceso de vacunación.
Igea denuncia un “cambio de criterio” hacia un reparto por porcentaje de población total y no por población a vacunar. En este sentido acusa directamente al Delegado del Gobierno en la región de engañar a la población y le invita a “sacar la calculadora” porque Castilla y León con el 6.49 de la población mayor de 60 años y muchos profesionales sanitarios solo ha recibido el 6.34% de las vacunas. El delegado del Gobierno señala que la comunidad solo tiene el 5% de la población total de España. “Son declaraciones que perjudican a los ciudadanos de Castilla y León”, señala Igea.
“No vacunamos aragoneses, manchegos o gallegos”, señala el portavoz del ejecutivo autonómico, “vacunamos españoles en función de su edad”. Igea también lamenta que otras las comunidades no sean trasparentes con las dosis que reciben para poder comprar. Igea incide en que la vacunación debe hacerse por personas y edades y no por territorios. Algo que en un primer momento beneficiaba a la provincia de Soria y ahora la deja un poco atrás en el reparto.
Un parón que el propio Igea reconoce podría ser mayor las próximas semanas. “Es probable que (en Soria) la afectación sea mayor porque es la provincia que mejor va”. Señala que si se detiene el ritmo de llegada de vacunas es “lo normal” que se detenga más en quien va mejor. “Lo mismo que digo para las autonomías lo digo para las provincias. El riesgo es por edades, no por provincias”.