Los edificios municipales de Soria podrían ahorrar al año alrededor de 196.000 €

Un estudio de la Universidad de Valladolid (Uva) ha mostrado que el Ayuntamiento de Soria podría ahorrarse hasta 196.000 euros anuales con el uso de energías renovables.

Este proyecto, llevado a cabo por los profesores Víctor Alonso y Sara Gallardo, ha analizado 22 instalaciones municipales. En él se han estudiado las posibilidades que tenía cada edificio para la implantación de este tipo de energías.

Mediante diferentes softwares los profesores han planteado la inversión que sería adecuada, el ahorro anual que supondría el uso de estos tipos de energía y los años necesarios para recuperar el dinero invertido en 3 escenarios distintos.

Escenarios

Los distintos edificios municipales se han dividido en 3 grupos diferentes en función de sus características (consumo energético, usos de la instalación…).

El primer análisis tiene como protagonista a la energía fotovoltaica. La implantación de esta opción en las instalaciones municipales conllevaría una inversión de 641.000 euros. Con ella se ahorrarían 118.000 anuales, por lo que en 7 años se habría recuperado el capital invertido.

La energía térmica copa el segundo escenario y está relacionada con los polideportivos con piscina climatizada. Con 100 paneles solares y una inversión de 128.000 euros se ahorrarían 26.000 al año, estando en 6 años amortizada.

En cambio, con 285 paneles (el máximo legal) y una apuesta de 336.000 euros, se ahorrarían anualmente 60.000 euros y se recuperaría todo el dinero en 6 años.

El último escenario plantea la instalación de un sistema híbrido conectado a la red con producción eléctrica fotovoltaica y almacenamiento mediante energía hidráulica.

Con él se busca satisfacer la demanda en el parque del castillo mediante depósitos que oscilan entre los 700 m3 y los 6.700. La inversión sería de entre 460.000-550.000 euros en función del tipo de depósitos y el período de amortización rondaría los 25-30 años.

El alcalde de Soria, Carlos Martínez, ha valorado de manera muy positiva el estudio: “Queremos que sea la base del proyecto. El sacarlo adelante supondría un importante ahorro en la factura eléctrica del Ayuntamiento y sería una de las señas de identidad de la ciudad en la lucha contra el cambio climático”.