La Junta de Castilla y León destina este año, dentro del Plan de Empleo de Castilla y León, 79,4 millones de euros para desarrollar políticas activas de empleo que promuevan la inserción laboral y mejoren la calidad del empleo de los jóvenes de la Comunidad. Los programas y medidas, consensuados con los agentes Económicos y Sociales en el ámbito del Diálogo Social, han sido analizados por la consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, durante el encuentro celebrado hoy en Palencia con el Consejo de la Juventud de Castilla y León.
La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, ha participado hoy en Palencia en un encuentro organizado por el Consejo de la Juventud de Castilla y León donde ha desgranado las políticas activas de empleo dirigidas a los jóvenes de la Comunidad que se están desarrollando desde la Consejería de Empleo e Industria. Estas iniciativas, incluidas en el Plan de Empleo de Castilla y León 2021 consensuado en el seno del Diálogo Social, pretenden favorecer la inserción laboral y mejorar la calidad en el empleo de los jóvenes de la Comunidad.
La consejera ha señalado que mejorar el empleo juvenil es una de las prioridades de las políticas de empleo de la Comunidad porque solo apostando por los jóvenes es posible apostar por el futuro de Castilla y León. En este sentido, ha indicado Amigo, el empleo de calidad es fundamental para que los jóvenes puedan desarrollar su proyecto de vida y bienestar; pero también para que Castilla y León pueda hacer frente a los retos de lucha contra la despoblación y desarrollo sostenible.
El Plan de Empleo recoge programas y medidas que beneficiarán a los jóvenes de Castilla y León por valor de 79,4 millones de euros. Estos programas se estructuran en tres ejes fundamentales: el apoyo a la contratación y al emprendimiento a través de distintos incentivos económicos que favorezcan el empleo de calidad, la mejora de la cualificación y la formación con una oferta dinámica y adaptada las necesidades del tejido productivo, y una labor de intermediación más efectiva diseñando itinerarios personalizados y proporcionando a los jóvenes las ofertar laborales que mejor se adapten a sus competencias y capacidades.
Las iniciativas recogidas en este eje tienen por objeto incentivar la contratación, la creación de empleo o el mantenimiento de los puestos de trabajo de los jóvenes menores de 35 años en condiciones de calidad, además de fomentar la iniciativa empresarial y el autoempleo impulsando la generación de empleo y el desarrollo económico local.
Dentro de esta línea de trabajo se incluyen los planes de empleo local, para la contratación de jóvenes a través de las entidades locales, tanto aquellos destinados específicamente a la contratación de jóvenes como aquellos que tienes a las personas jóvenes como colectivo prioritario. Estos programas permitirán la contratación directa de más de 1.700 jóvenes.
Los jóvenes son también un colectivo prioritario dentro de los incentivos para favorecer la contratación indefinida a jornada completa y el incremento de plantillas en las empresas de Castilla y León. En este sentido, los incentivos se incrementan en un 50% cuando los contratos objeto de subvención van dirigidos a los jóvenes.
Estos incentivos adicionales se aplican también a los programas de ayuda al autoempleo, a los que se destinan siete millones de euros, dos de ellos para el programa de egresados del sistema educativo.
El segundo gran eje de actuación es la formación y la cualificación profesional para facilitar la inserción laboral y favorecer la adquisición de nuevas capacidades que mejoren la empleabilidad y la promoción laboral. A estos programas de formación para jóvenes o con la participación de jóvenes se destinan 48 millones de euros.
Igualmente, se ha hecho un esfuerzo por adaptar la oferta formativa a las demandas del tejido productivo y a las necesidades formativas de los jóvenes; incrementando la formación que requiere un mayor nivel de capacitación y los programas dirigidos a la mejora de las cualificaciones orientadas a los sectores u ocupaciones emergentes y con elevados niveles de innovación.
Dentro de los programas de formación, los jóvenes de Castilla y León podrán beneficiarse especialmente de los programas mixtos de formación y empleo que combinan la formación teórica y práctica con la realización de un trabajo efectivo y remunerado. Igualmente, el colectivo de personas jóvenes podrá beneficiarse del programa Reto Castilla y León Cibersegura que impartirá 790 acciones formativas (675 en competencias digitales y 115 en ciberseguridad).
El Plan de Empleo mantiene la apuesta por la colaboración con las Universidades Públicas de Castilla y León y con las empresas de sectores estratégicos para fomentar las practicas no laborales de nuestros jóvenes recién titulados y la formación profesional específica en las empresas de la Comunidad. A estos programas se destinan más de seis millones de euros.
El tercero de los ejes de actuación engloba los servicios de orientación, información e intermediación laboral con el fin de proporcionar a los jóvenes las ofertar laborales que mejor se adapten a sus competencias y capacidades y facilitar a los empleadores los trabajadores más apropiados a sus requerimientos y necesidades.
A través de estos programas el Servicio Público de Castilla y León realizará un diagnóstico de la empleabilidad de cada uno de los demandantes de empleo, valorando los tipos de acciones que mejorarían su empleabilidad para facilitar la gestión de las políticas activas de empleo y el diseño de itinerarios personalizados.
La intermediación laboral incluye la Red Eures, que presta servicios a los trabajadores, a los empresarios, y a cualquier ciudadano que desee beneficiarse del principio de la libre circulación de personas, proporcionando información y asesoramiento sobre ofertas y demandas de empleo, situación y evolución del mercado de trabajo, así como sobre las condiciones de vida y trabajo en los países de la red.
Las medidas de este eje para jóvenes se estiman en cuatro millones de euros. A este presupuesto hay que añadir el trabajo que se realiza con medios propios y que se ha reforzado con un centenar de prospectores laborales que están realizando una extraordinaria labor a la hora de poner en contacto a los empleadores y a los demandantes de empleo incluidos los demandantes jóvenes.
Junto a las medidas contempladas en el Plan de Empleo de Castilla y León 2021, la Consejería de Empleo e Industria trabaja en otros dos programas dirigidos a jóvenes menores de 30 años que se desarrollarán en colaboración con el SEPE en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Por una parte, el Programa “Investigo” que pretende promover la contratación de jóvenes menores de 30 años en organismos públicos de investigación, universidades públicas, centros tecnológicos, parques científicos y tecnológicos o empresas que inviertan en investigación e innovación. Para ello los empleadores contarán con subvenciones de entre 33.000 y 22.400 euros por año de contrato en función del grupo de cotización.
Por otra parte, el Programa “Primeras Experiencias en la Administración” financiará en la modalidad de contrato en prácticas, los contratos de personas jóvenes, menores de 30 años, en el seno de las administraciones públicas con subvenciones de entre dos y tres veces el IPREM en función del grupo de cotización.
Según los datos de la EPA del primer trimestre del año, la tasa de paro juvenil en Castilla y León se sitúa en el 32,08%, 7,5 puntos por debajo de la media nacional, que es del 39,53%. A pesar de que la tasa de desempleo juvenil se incrementó en 6 décimas durante el año de pandemia, Castilla y León es la tercera comunidad autónoma con menor tasa de paro juvenil, solo por detrás de Cantabria, Navarra y Madrid.
En cuanto a los datos de paro registrado entre los jóvenes, este se ha reducido en el último año en un 4,51%, frente al descenso del 1,13% registrado de media a nivel nacional. El número total de parados jóvenes inscritos como demandantes de empleo a finales de mayo en Castilla y León se situó en 14.447. En los últimos tres meses Castilla y León ha recuperado la mitad del empleo joven perdido desde marzo del 2020, con 2.407 parados menos entre los meses de febrero y mayo.