La AEMET anuncia una jornada marcada por las nubes altas y en la que arrancará el descenso térmico.
El último domingo de agosto será una jornada típicamente de transición ante la inminente llegada de la inestabilidad meteorológica. El día, no obstante, será agradable y, por el momento, la Agencia Española de Meteorología descarta la prosiblidad de precipitaciones.
La nubosidad será más intensa por la tarde y las temperaturas descenderán un par de grados respecto a la jornada de ayer. Las máximas no superarán los 30 grados en ningún punto de la geografía provincial. Las mínimas no experimentarán grandes cambios y se mantendrán en el entorno de los 10 positivos.
El viento tampoco será un factor determinante, aunque hacia la mitad del día podría llegar a alcanzar velocidades de 25 kilómetros por hora.