Pide al Ministerio de Sanidad la catalogación y registro de estos trastornos post-Covid físicos y psicológicos.
Más de 500.000 personas sufren secuelas de lo que se ha llamado Covid persistente, tras pasar esa enfermedad, “un problema importante y real” que las autoridades sanitarias deben afrontar y atender. Es necesaria una adecuada planificación y no volver a caer en improvisaciones, remarca CSIF.
Así se ha señalado en el primer curso celebrado en la Comunidad sobre ‘Secuelas, seguimiento y recuperación post-Covid’, organizado por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios de Valladolid (CSIF) y la Fundación General de la Universidad de Valladolid (FUNGE Uva), y que ha servido para conocer las secuelas de la Covid-19, sus tratamientos y cuidados en las diferentes áreas de la medicina, así como valorar la necesidad de planificación de los recursos técnicos y humanos necesarios para atender a estos pacientes.
Ha sido un curso online “muy novedoso y actual. Es la primera vez que se realiza una actividad formativa sobre este tema en Castilla y León, sobre las consecuencias, para la salud, de la infección por Covid-19, el seguimiento, la recuperación o las secuelas, dirigido a trabajadores, profesionales y estudiantes vinculados a la rama sanitaria y sociosanitaria”, explica la presidenta de CSIF Valladolid, María José San Román.
Los asistentes han podido intercambiar pareceres y experiencias vividas, lo que les ha ayudado a adquirir conocimientos de otros profesionales. “Aunque no hay todavía una postura unánime de si la Covid persistente es una complicación de la Covid, o se trata de una nueva enfermedad, se entiende que una persona sufre Covid persistente cuando mantiene síntomas o secuelas tras pasar un mes desde que ha superado la enfermedad”, han comentado varios ponentes.
Curiosidades como que “parece que afecta más a mujeres que a hombres” han sido objeto de muchas preguntas; y uno de los puntos en los que ponentes y asistentes han coincidido es que “los pacientes con Covid pueden llegar a desarrollar trastornos físicos y psicológicos que afectan a la vida cotidiana”.
“Para ello”, han insistido, “hay que concienciar a la población de que deben acudir a profesionales sanitarios, y no a alternativas inadecuadas o intrusistas, ni a internet”. La Covid persistente ha sido descrita como una manifestación de síntomas múltiples (malestar, fatiga, fiebre, dolor, neurológicos, respiratorios, digestivos, entre otros) que se mantienen en el tiempo. La atención del paciente desde los centros de Atención Primaria y unidades de Covid persistente creadas recientemente, en la mayoría de centros hospitalarios, ha sido objeto de dos ponencias, en las que se ha remarcado la importancia de la coordinación entre ambos niveles asistenciales, que necesitan del personal necesario para hacer frente al volumen de pacientes que requieren este tipo de atención sanitaria”, insiste CSIF.
CSIF ha reclamado al Ministerio de Sanidad que incluya la catalogación -y lo casos- de la Covid persistente en el registro de datos notificados de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, y que identifique si corresponden a profesionales sanitarios o sociosanitarios.
Los asistentes a las jornadas ‘Secuelas, seguimiento y recuperación post-Covid’ recibirán una acreditación de 50 horas y dos créditos por parte de la FUNGE Uva. Esta es una más de las múltiples acciones formativas organizadas por CSIF Valladolid que, por motivos sanitarios de la actual pandemia, se ha desarrollado en formato online.
El curso ha durado un mes, del 28 de septiembre al 29 de octubre, y ha contado con ponentes de prestigio, como son Santiago Juarros Martínez (neumología clínica), Sofía Jaurrieta (Covid persistente), Santiago Félix Gallego Andrés. (Atención Primaria), Rosa María Cardaba García (enfermería), Rafael Martín Sánchez (psicología), Raúl Ortiz de Lejarazu (virología y vacunación), Susana Cofiño Rodríguez (rehabilitación): Jose Javier García Frade (hematología), y Ángel Luis Guerrero Peral (neurología).