Todas las entidades firmantes del acuerdo plantean la falta de equilibrio entre objetivos sociales y económicos con criterios eminentemente ambientales, lo cual perjudica la actividad agraria y el desarrollo de regadíos en Castilla y León.
El viceconsejero de Desarrollo Rural y director general del Instituto Tecnológico Agrario, Jorge Llorente, acompañado de la directora general de Desarrollo Rural, María González, han registrado en la mañana de hoy telemáticamente las alegaciones firmadas conjuntamente por el sector agrario, ayer, en Palencia.
La Consejería reitera que en su apuesta por mejorar un uso sostenible, racional y equilibrado del agua para el regadío, las alegaciones plantean diferentes ámbitos de actuación: mayores regulaciones en la cuenca del Duero, por tratarse de la que menor capacidad de regulación tiene, a excepción de las del norte de España, inclusión de nuevos regadíos, mejora en la gestión de las aguas subterráneas y la contaminación difusa.
Todo ello teniendo en cuenta que Castilla y León tiene un porcentaje de regadío respecto a la superficie de cultivo del 12,6% frente al 21,7% de la media nacional, es decir nueve puntos por debajo.
Integrantes de la firma conjunta
Como recordatorio, citar que el documento ha sido elaborado y suscrito por la Consejería, las diputaciones provinciales de Ávila, Burgos, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora, las cuatro organizaciones profesionales agrarias con representación en la Comunidad (Asaja, Upa, Coag y Uccl), la Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (Urcacyl) y la Asociación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero (Ferduero).