La localidad ribereña pone en escena su belén viviente en el que no falta ningún detalle.
En la tarde-noche de este sábado, San Esteban de Gormaz dejaba de par en par sus puertas abiertas para celebrar la puesta en escena del nacimiento de Jesús. Una representación exhibida con todo detalle y que fue presenciada por centenares de personas.
La velada, organizada por la parte municipal, contaba participación de un buen número de vecinos que prestaron su buen hacer para llevar a buen fin este belén viviente, coincidiendo con el día de Navidad, en la localidad ribereña.