La Diputación entrega la silla número 490 al proyecto solidario de Castejón del Campo

‘Gracias por Resistir’ es el nombre de la silla 490, que esta mañana ha entregado Eva Muñoz, diputada de Servicios Sociales e Igualdad, en nombre de la Diputación al proyecto de ‘Sillas Solidarias’ de Castejón del Campo, pedanía de Almenar.

La unidad proporcionada hoy refleja un código QR que enlaza con el vídeo editado por el Departamento de Servicios Sociales, que lleva el título 'La verdadera resistencia: Nuestros mayores’, para Conmemorar el Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la vejez, que se celebra cada 15 de junio.

“La silla 490 que hoy entregamos al proyecto solidario de Castejón del Campo, ha sido testigo de los testimonios de quienes son los verdaderos resistentes de nuestros pueblos, y así lo han demostrado durante la pandemia generada por la enfermedad Covid-19. Nuestros mayores son quienes reflejan el grito de auxilio del medio rural”, ha señalado Muñoz, quien ha estado acompañada por trabajadores de su departamento y por Ana Sánchez, quien promoviera esta iniciativa en 2019.

“Un temporal en invierno provocó el derrumbe de una vivienda y tras un paseo por las calles de Castejón del Campo, nos detuvimos frente a las ruinas de esa casa ya sin alma y nos dimos cuenta que al otro lado de la puerta todavía sobrevivían dos sillas alrededor de una mesa con la cena, que a día de hoy son el inicio del proyecto ‘Sillas Solidarias’, que recuerda la vida de los pueblos de la provincia y son símbolo de transmisión”, ha descrito Sánchez.

De este modo, a estos primeros asientos se han ido uniendo nuevas compañeras de viaje de todos los puntos de la provincia y de España realizadas por ayuntamientos, asociaciones, instituciones, artistas y vecinos.

La sillas 487 y 489 también han sido entregadas esta mañana. Dos jóvenes artistas de Teruel, exactamente de Torre los Negros, que han conocido la iniciativa a través de las Redes Sociales, han hecho entrega de dos sillas que representan la vida de sus pueblos vacíos, llenos de recuerdos y tradiciones. La silla refleja las palabras que para muchos significa el nombre de pueblo, según ha testificado Eva Muñoz.

La iniciativa cuenta con más de cinco mil unidades repartidas entre 517 pueblos de España. “Cada silla refleja una ilusión diferente con el objeto de asentar población en el medio rural. La vida en el pueblo merece la pena y sillas solidarias es una muestra de un patrimonio rural que demuestra día a día la capacidad de regeneración”, ha concluido Sánchez.