Diócesis de Osma-Soria: De la puesta en valor del patrimonio a los fondos Covid

La diócesis de Osma Soria está trabajando en la creación de unas audioguías turísticas que enlacen los templos más importantes de la provincia. Una apuesta por la cultura que aúna la creación de posibilidades turísticas y económicas con el potencial evangelizador de los templos, señala Monseñor Abilio Martínez Varea. La primera de ellas, que podría estar lista para Semana Santa, unirá 4 templos de la capital; el Espino, San Juan de Rabanera, La Mayor y Santo Domingo

Una prueba piloto que de salir bien cuenta con la intención por parte de la Diócesis de ampliarla a otros puntos de la provincia como San Esteban – El Burgo – Ucero, Ágreda o Medinaceli – Almazán. Además, también es el objetivo de la diócesis realizar una segunda audioguía de la capital con la Concatedral de San Pedro y San Saturio a la que quieren sumar, y ya han pedido permiso para ello, los Arcos de San Juan de Duero.

Precisamente sobre el templo del patrón de la capital, el obispo de Osma-Soria se muestra optimista sobre una actuación que adecue la Ermita. Cabildo y Ayuntamiento, que en público han mostrado su compromiso con el proyecto, se encuentran a la espera de que la Junta presente el estudio adjudicado sobre la situación actual del tempo. Abilio señala que el primer paso será “acabar con el problema de humedad que es lo que estropea las pinturas” para luego proceder a su recuperación.

El obispo es optimista, “se va a hacer”, pues conoce la “voluntad de la Junta de Castilla y León de sufragar la reparación de las pinturas”, algo que, ya avisa, no va a resultar barato. Destaca Martínez Varea que el Ayuntamiento y la diócesis también están “dispuestos a implicarse”. Actuaciones que también llegarán a 4 templos de la provincia (por el momento de desconocen cuáles) gracias a un convenio con Diputación que movilizará 333.000 euros, de los que la institución provincial aporta el 30%, el 45% el obispado y otro 25% la parroquia beneficiaria.

Falta de vocaciones

Martínez Varea señala que “mantener el templo, con 20, con 8 o con 6 personas, también es una forma de luchar contra la despoblación. En esta tarea destaca la “implicación” de los párrocos de la provincia que “no se jubilan hasta que no pueden más”, con algunos ejerciendo con más de 80 años. “Las previsiones en 10 o 15 años no son halagüeñas”, lamenta y señala que la diócesis ya se prepara para la nueva realidad.

La apuesta son los “laicos cualificados” para que tengan la “encomienda” de asistir a la parroquia. Algo que, señala va más allá de la lectura de la palabra y puede abordar tareas tan diversas como la atención a os enfermos o la preparación de los niños para la comunión. Actualmente la Diócesis de Osma Soria cuenta con 3 vocaciones, “que ahora tienen que fructificar”, puntualiza, en la Facultad de Teología de Burgos. Además, hay 6 personas en el seminario menor de El Burgo de Osma, una institución que no se cierra pese a la “precariedad numérica” porque sirve “de faro para recordarnos la falta de vocaciones”, señala.

Fondo Extraordinario

La Diócesis de Osma Soria ha creado un nuevo fondo extraordinario de 55.000€ (a partes iguales entre el Fondo Diocesano de Solidaridad y Cáritas) para ayudar a aquellos negocios familiares que peor lo están pasando durante la pandemia. Un fondo Que en su primera actuación ha ayudado a 121 de las 129 solicitudes presentadas con un desembolso de casi 110.000€ y una ayuda media por empresa de más de 900€. El Obispo ha agradecido las donaciones de sacerdotes, religiosos, cofradías o fieles particulares a este fondo y ha recordado a las pequeñas empresas sorianas más golpeadas por la pandemia que pueden acudir a él.

Una crisis del Covid que aún sigue muy presente en el día a día de la Iglesia pues “la vuelta a los templos está costando”, reconoce Abilio, sobre todo en los oficios de los domingos, aunque no tanto en otras celebraciones como las comuniones. El obispo señala que la fe “es mejor si nos vemos” y ha recordado que los templos son “muy seguros” y “muy exigentes” con el cumplimento de las medidas. La Diócesis prepara una campaña para animar a la presencialidad “cuando todo esto haya pasado”.

Mientras eso llega, las Juntas de Cofradías se preparan para una “Semana Santa normal”, aunque con mascarilla y plan B. Sobre la situación entre Rusia y Crimea, Monseñor Abilio Martínez Varea ha recordado que “la paz es algo que lleva en las personas” y que esta debe ser vivida “en todos los ámbitos de la vida”, recordando que la guerra debe ser siempre “el último recurso”.