Las obras del nuevo colector de la depuradora de Ágreda contemplan un tramo de 300 metros

El colector que llega de Ólvega a Ágreda con aguas residuales variará su trazado en esta última localidad, según ha detallado el jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente en la provincia, José Antonio Lucas. Serán más de 300 los metros a construir que discurrirán paralelos a la línea de ferrocarril, a la altura de la Dehesa, en la Villa de las Tres Culturas.

La inversión prevista para esta infraestructura y otras actuaciones, que se enmarcan en la optimización de la depuradora, ronda los tres millones de euros, que serán costeados al 80% por la Junta de Castilla y León y el 20% restante, a partes iguales por ambos municipios, según el acuerdo suscrito conjuntamente entre las administraciones implicadas.

Lucas ha explicado que la existencia de las denominadas "aguas parásitas" llevan a que la actual canalización en esa zona deje de estar operativa. Son aguas de manantial que, al mezclarse con las residuales, hacen que la depuración no sea la adecuada en las instalaciones ubicadas en el término llamado 'Plazarín', aguas abajo del pueblo. De hecho, la zona de la Dehesa agredeña es conocida por la humedad de su subsuelo, sobre todo en la zona de los llamados Ojillos, en las inmediaciones del campo muncipal de fútbol.

La canalización deberá separarse del paseo, ya que está declarado como Bien de Interés Cultural, aunque no invadirá terrenos de RENFE ya que el gestor de infraestructuras ferroviarias Adif, no ha facilitado la cesión de terrenos que jalonan la línea férrea. Con todo, la obra cuenta con el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Ebro.

Lucas también se ha referido a la reciente tala de chopos en la Dehesa de Ágreda, una actuación que también aconsejó por tratarse de árboles envejecidos y en su mayoría enfermos, los cuales ponían en serio peligro a las personas que pasean por esta zona. Las unidades cortadas serán sustituidas por otros árboles, según ha previsto el Ayuntamiento.