Las Fiestas de San Juan 2022 han aumentado los contactos y con ello se han disparado las sospechas de contagios COVID. En Soria capital podrían estar vendiéndose unos 450 tests de antígenos al día.
Terminados estos días de San Juan, puede que muchos estén todavía enfrentándose a los resultados de estas 5 jornadas de fiesta. Algunos estarán poniendo lavadoras para dejar la ropa guardada hasta el año que viene, otros estarán acudiendo a comprar comida sana para depurar el organismo y otros tantos estarán todavía superando un intenso cansancio y dolor de garganta fruto de muchas horas en la calle. ¿O puede que no sea solo eso?
A fecha de Martes a Escuela, la ocupación de camas de hospitalización por casos de COVID-19 en Soria se encontraba en riesgo medio, aunque en la UCI no había ninguna cama ocupada por este motivo y la provincia se considera todavía, en situación de riesgo controlado en el marco de esta séptima ola de la pandemia. Sin embargo, entre el 1 y el 5 de julio se registraron en la provincia de Soria 241 nuevos positivos COVID. Esto son 51 positivos más que en el periodo entre el martes anterior al Pregón y el Viernes de Toros, y casi 100 más que los registrados en la semana previa a las Fiestas.
Algunos farmacéuticos de la capital aseguran que la venta de test de antígenos ha aumentado considerablemente a partir del Pregón. En la primera quincena del mes de junio, algunas farmacias vendieron entorno a 15 o 20 test diarios y en la segunda quincena, empezados ya los Presanjuanes, llegaron a doblar ese número. Ahora, despachan el triple que a principios del sexto mes y un 40% más que antes de que empezaran las fiestas. El Martes a Escuela cientos de sorianos emprendieron su camino hasta la farmacia más cercana buscando una respuesta a sus dolores de garganta. En algunos establecimientos llegaron a vender hasta 90 test y experimentaron, en general, un pico en sus ventas.
Según las estimaciones de estos profesionales, en la capital podrían estar vendiéndose unos 450 o 500 test de antígenos diarios en estas jornadas posteriores a las fiestas. Afirman que, aunque cada persona necesitaría tan solo dos test si calculara correctamente los tiempos de incubación posteriores al contacto con un positivo y a la finalización de los síntomas, normalmente acaban siendo tres o cuatro, ya que muchos tratan de conseguir positivos y negativos antes de tiempo.
Creen que es a partir de ahora cuando se harán visibles los datos de contagios que se han producido durante estas fiestas y consideran que la población general ya conoce la enfermedad y está muy concienciada en el ámbito de la prevención. El dolor de garganta y la afonía son síntomas compartidos con los días y noches de fiesta acompañados de bebidas refrescantes, aunque recuerdan que el COVID suele generar picos de fiebre que son más difíciles de confundir con una simple resaca.