El Ayuntamiento de la localidad ha impulsado obras en distintos recintos e infraestructuras con el objetivo de mejorar su accesibilidad para personas con discapacidad y de la tercera edad. Además, el pueblo se vuelve más seguro gracias al paso elevado en la entrada de Matamala.
Tardelcuende sigue dando pasos para convertirse en una localidad de la que todos sus vecinos y visitantes puedan disfrutar. Por ello, el Ayuntamiento ha estado trabajando en una serie de obras que comparten el objetivo común de mejorar la accesibilidad del pueblo. Como no podía ser de otra forma, la propia institución municipal también se ha sumado a esta inciativa, predicando con el ejemplo, con el fin de facilitar el acceso de sus habitantes a los trámites administrativos.
Las oficinas del Ayuntamiento de Tardelcuende se trasladan a la planta baja, “un gran avance dada la longevidad de sus habitantes”, afirma su alcalde, Ricardo Corredor. Esto, que puede parecer solo un pequeño cambio, supone un gran paso para el pueblo. El proyecto había sido ampliamente solicitado por los propios vecinos, que fuera de los meses de verano presentan una media de edad de 56 años. “Hace años que pensamos hacerlo”, asegura Corredor, aunque “hasta ahora no había habido una ayuda específica”. En esta ocasión, ha sido ADEMA la que ha facilitado una subvención al peublo por valor de 15.000€, que ha ayudado a afrontar los 53.000€ de inversión que suponían este traslado.
Las piscinas de verano, que ya está en funcionamiento, también se ha beneficiado de este impulso a la accesibilidad para todos los visitantes. Las grandes novedades de este año son el servicio adaptado para personas con discapacidad y la rampa de acceso al bar que han tenido un coste de 20.000€. Dos obras que facilitarán el día a muchos de los asistentes y les permitirán disfrutar de sus chapuzones estivales con más independencia y comodidad.
Y dado que el ocio es vital para el mantenimiento de la vida en el pueblo, se va a "habilitar un servicio para personas con discapacidad en el cine, además de una entrada lateral sin escaleras”. Otra gran obra, la que facilitará el paso entre dos céntricas plazas de la localidad, ya ha sido adjudicada y financiada en parte con fondos de la Junta, siendo el propio Ayuntamiento el encargado de completar la inversión. “Queremos unir la Plaza del Ayuntamiento y la Plaza del Colegio, que ahora tienen escalera, con una rampa", afirma el alcalde. Sin embargo, estas dos obras, para las que han sido destinados 57.000€, no estarán terminadas hasta octubre de este año.
Corredor asegura que este camino de Tardelcuende en busca de la accesibilidad no se detendrá aquí, y que seguirán dando pasos en esta dirección invirtiendo en más adaptaciones en las piscinas y varios edificios municipales.
Otra de las obras que sí estarán terminadas para el uso y disfrute de los vecinos durante este verano es el paso elevado en la entrada de Matamala que llega hasta la Plaza Mayor “para mayor seguridad de todos en el verano”, apunta el alcalde. Más de 8 metros que obligarán a reducir el paso a aquellos conductores que se acerquen a la localidad “a más velocidad de la normal”.