El Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León advierte de la falta de relevo generacional. En toda la región, solo el 8,7% de donantes de 2021 fueron noveles.
La donación de sangre es una actividad vital para el mantenimiento de nuestro sistema sanitario. Durante los meses de verano las reservas suelen encontrarse en niveles muy bajos por la reducción del número de estas aportaciones, aunque el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León se plantea problemas más graves que pueden acabar haciendo mella en las reservas a largo plazo: la falta de nuevos donantes.
La media de aportadores noveles en Castilla y León en 2021 se situó en el 8,7%. Existen varias provincias que superan esta cifra. En cabeza está Ávila con un 11,4% de sus 5.340 donaciones. Le sigue de cerca Salamanca, con un 11'1% de sus 12.872 donaciones, que en números totales, duplica de sobra el número de donaciones por primera vez que presentaban las tierras abulenses, incluso contando con menos habitantes. Las siguientes en la lista son León y la zona del Bierzo, con un 9'7% y un 9'1% respectivamente.
Comienza a partir de aquí la lista de provincias que no alcanzan la media de primeras donaciones de la región, encabezada por Valladolid con un 8,4%, seguida de Segovia con un 8'3% y Zamora con un 8,1%. Burgos fue la provincia con menos proporción de nuevos donantes con un 6'7% y, empatadas en el penúltimo lugar, se encuentran Soria y Palencia con un 7,5%.
Estos datos de primeras donaciones no son del todo representativos en el aumento anual del número de donantes habituales. Desde el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León advierten de que de las 8.705 personas que se acercaron a donar sangre por primera vez el pasado 2021 en la región, tan solo repitieron el 52'9%. En el Chemcyl preocupa la falta de relevo generacional