El Club Pelota Urbión busca reinventarse para "sobrevivir"
Las manos de los jugadores del Club Pelota Urbión con su herramienta de trabajo. /María Ferrer
La despoblación está haciendo mella en la cantera y el club pretende ampliar la escuela con jóvenes residentes en pueblos vecinos. Se persigue también la creación de otras escuelas en "pueblos grandes" para poder configurar una liga de pelota provincial.
El Club Deportivo Pelota Urbión no ha parado de cosechar éxitos durante los últimos años. Gracias también al apoyo de la Diputación Provincial (entidad con la que acaba de suscribir el tercer convenio de colaboración por un valor de 10.000 euros) se cuenta con un equipo en División de Honor y otro, denominado Urbión B, también de carácter profesional.
La satisfacción del club es total en este sentido y desde la institución provincial les felicitan por "promover la tradición y las raíces de nuestra tierra" a la vez que "por servir de ejemplo de que en los pueblos se puede hacer deporte y hacerlo con calidad y con nivel", ha expresado Benito Serrano, presidente de la Diputación de Soria.
No obstante, no todo son alegrías en el seno de la entidad deportiva. José Luis Molina, residente del Club Deportivo Pelota Urbión, lamenta la pérdida de efectivos en la escuela, consecuencia de la despoblación que afecta a la comarca de Pinares. Asegura que en los últimos 10 años los jóvenes que practican este deporte han pasado de rondar el medio centenar a no alcanzar la veintena, una situación que preocupa a medio plazo.
"Hay que darle una vuelta a esto porque un club sin cantera no puede sobrevivir a futuro", ha señalado Molina. Desde el Club se estudia recuperar los desplazamientos a pueblos vecinos como Vinuesa, Navaleno o San Leonardo. El presidente ha asegurado que ahora que el club es solvente "podemos afrontar el pago de kilometrajes".
Molina también ha apuntado a la posible creación de otras escuelas en "pueblos grandes" como Almazán o El Burgo de Osma. Allí los problemas para encontrar niños con ganas de probar nuevas disciplinas no serían tantos y, junto con la escuela de pelota de Golmayo, se podría configurar una liga provincial que sirviese como motor motivador de la cantera.