Su ejecución, en el término municipal de Montejo, mejorará las infraestructuras agrarias de la zona.
Durante la mañana de este jueves, la delegada territorial, Yolanda de Gregorio, ha visitado el municipio de Montejo de Tiermes, donde la Junta está concluyendo las obras de mejora y acondicionamiento de un camino rural, de 2,2 kilómetros, que evitará tráfico rodado de maquinaria agrícola en la zona afectada por el B.I.C. (Bien de Interés Cultural) ‘Ciudad celtibérica romana de Tiermes’ y en cuya ejecución la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha invertido 107.558,35 euros, con cofinanciación FEADER.
El camino, ya transitable con las obras prácticamente finalizadas, conecta la carretera de acceso al yacimiento arqueológico de Tiermes (provincial SO-P-4120) con las localidades de Manzanares y Sotillos de Caracena. Con esta actuación se mejoran las comunicaciones en esta parte de la Sierra de Pela, facilitando el acceso a las explotaciones ganaderas de la zona, sirviendo de variante al actual camino existente que atraviesa el yacimiento de Tiermes, evitando su deterioro y el impacto que supone el tráfico de vehículos pesados en esta zona arqueológica.
Yolanda de Gregorio ha estado acompañada del alcalde de Montejo de Tiermes, Carlos Vilalta, los jefes de los servicios territoriales de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, José Manuel Ruiz, y Cultura y Turismo, Carlos de la Casa, así como del director de las obras, responsables de la empresa y otros representantes municipales y vecinos. En su visita, la delegada territorial ha recordado el compromiso de la Junta con las zonas rurales y el sector agrario, así como con la protección de nuestro patrimonio cultural y el turismo.
Mejora de infraestructuras y seguridad vial
La intervención se inició con los trabajos necesarios para preservar el patrimonio arqueológico y cultural. Para ello se detallaron y presupuestaron las acciones necesarias, consistentes en prospecciones y balizado arqueológico previas al inicio de la obra, excavación y control arqueológico y, finalmente, instalación de señales informativas. La propuesta de actuación fue aprobada por la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural.
El camino se ha construido con una calzada de seis metros de anchura de pavimento estabilizado en toda su longitud, con material granular procedente de canteras naturales locales, con cunetas de 0,5 metros.
La actuación ha incluido una serie de obras de fábrica de nueva construcción, el pavimento en hormigón de un entronque con la carretera provincial SO-P-4120, el balizamiento necesario para la correcta señalización del camino, incluyendo señales de stop, recomendación de velocidad máxima (40 km/h) por ser un camino rural, vallas tipo bionda, etc.
El proyecto también ha contemplado una partida destinada a restauración del medio natural.