El Ayuntamiento de El Burgo solicita un taller de empleo en hostelería

El Ayuntamiento de El Burgo de Osma-Ciudad de Osma ha solicitado a la Junta de Castilla y León un nuevo programa mixto de formación y empleo. Se trataría de un taller más extenso en cuento a tiempo y participantes que los últimos celebrados en la localidad y también con otra temática, se dejaría de lado la gerontología para centrarse en la hostelería en virtud de las necesidades de mano de obra cualificada que lastran al sector.

El plazo para solicitar estos programas concluyó el 30 de septiembre y, en tiempo y forma, el Ayuntamiento burgense pidió para la localidad un taller de formación en hostelería para 12 alumnos durante un año. El presupuesto estimado para la actividad sería de unos 300.000 euros que llegarían del organismo regional más otros 35.000 de carácter municipal.

Como refuerzo importantísimo para el desarrollo del taller, el Ayuntamiento ofrece como sede el bar restaurante de la terminal de autobuses. Desde el Consistorio no se dudará a la hora de cambiar de finalidad un edificio que, hasta ahora, no ha encontrado adjudicatario para explotarlo como negocio de restauración. La idea es que el taller pueda impartirse en unas instalaciones perfectamente equipadas para las tareas en las que se quiere formar.

Bajo el nombre de “Los Fogones del Burgo”, este taller constaría de dos módulos para cubrir diferentes enseñanzas. El primero de ellos, más largo, se ocuparía de todo lo referido a los bares y cafeterías. En la segunda parte, algo más breve, el temario versaría sobre las técnicas culinarias con la intención de formar a ayudantes de cocina.

Además de los 12 alumnos, el taller también empleará a los formadores; con un director al frente se necesitarán profesores especializados, no solo en cocina y restauración, sino también en otras materias fundamentales para el desarrollo de su trabajo como el inglés. La idea es que los alumnos también se formen en el mundo del vino que tanta trascendencia tiene para la zona y que sea un sumiller quien se ocupe de transmitir los conocimientos.

Las últimas semanas de formación de este taller, también podrían tener una finalidad social. La idea es que puedan ofrecerse una serie de menús diarios a personas que lo soliciten, aunque aún resta por ajustar cómo podría llevarse a cabo esta parte.

El objetivo último es lograr abastecer de mano de obra cualificada a los numerosos negocios de hostelería, que son parte importantísima de la economía local. Los bares y restaurantes burgenses, al igual que los de otras partes de España, tienen graves dificultades para encontrar trabajadores y les resulta aún más complicado que estos cuenten con la formación oportuna. El disponer del personal adecuado, en cuanto al número y en cuanto a sus conocimientos y experiencia, es fundamental para que el sector pueda crecer y con él toda la población.