Mínguez afea a Mañueco que exija a Sánchez una diferenciación que la Junta niega a Soria
Considera el alcalde de Soria que el PP centra el foco en este debate para quitarlo de su gestión. Además, lamenta que la patronal solo pida pagar menos y luego no este dispuesta a subir los sueldos a los trabajadores en una situación de inflación.
El alcalde de Soria se ha mostrado hoy incómodo sobre el debate generado en torno a las ayudas al funcionamiento del Gobierno para las provincias repobladas. “No se está haciendo demasiado bien la comunicación”, aseguraba al referir al debate público sobre las mismas donde, considera, predomina la intención del PP de “quitar el foco” de su gestión y la de la patronal de “pedir y pedir”.
Mínguez explica que no se puede estar al detalle de todas las explicaciones de los ministros, aunque reconoce que cuestiones como la retroactividad de la medida es algo que “tendrá que clarificar el Gobierno de España”. También señala que será positivo que estas ayudas en un futuro se puedan mejorar.
El alcalde socialista de Soria pide cambiar “el foco” al considerar el actual debate “una trampa” de algunos (en alusión al PP) “para no hablar de sus gestiones”. “Me importa más que estas ayudas se complementen por parte de la Junta y con otras acciones paralelas como las que está llevando a cabo el Gobierno de España”, señalaba.
Con todo, considera que actualmente, las empresas se ahorrarán “mínimo de 150€ al año por cado trabajador” con respecto a las provincias de nuestro entorno y 377€ con respecto a Madrid. Carlos Martínez ha calificado de “manotazo” las palabras de Alfonso Fernández Mañueco porque “para el en Castilla y León somos unos y no puede hacer diferencias, pero bien las pide al Gobierno”. Lamenta esa negación por parte de la Junta “de la situación de desigualdad de Soria”.
El socialista también tenía su dardo para FOES, la patronal soriana, “es legítimo que defienda sus intereses, pero no pueden estar permanente en la crítica, en el quiero más y quiero pagar menos”, señalaba. Algo que “chirría” a Mínguez porque luego “no se repercute en los bolsillos de los trabajadores”, lamentaba mientras recordaba que las empresas españolas “no quieren aceptar un pacto de rentas y subir los sueldos” para hacer frente a la inflación y mantener el poder adquisitivo de la clase media.