Cientos de montañeros no han querido perderse la tradicional subida del belén al pico de Urbión, en una fría pero luminosa mañana y con un hielo peligroso en el suelo. El buen humor no ha faltado y hasta se ha improvisado un singular belén viviente -que puede verse en la fotografía- en la cumbre soriana.
Numerosos grupos, llegados de diversos puntos de la provincia, han ascendido al Urbion esta mañana del domingo anterior a Nochebuena, para participar en la tradición de subir a colocar el belén. Los montañeros han accedido desde la La Laguna Negra y Covaleda, y el tiempo -aunque frío- ha acompañado. Por supuesto, no han faltado dulces y cava en la cumbre, en esta peculiar celebración de la llegada de la Navidad, a más de 2.200 metros de altitud.
La menor cantidad de nieve ha sido sustituida por un hielo peligroso, especialmente en las primeras horas de la mañana, que ha exigido precaución a los senderistas.