Simecal apuesta por mantener el modelo actual de Atención Primaria en el medio rural

Sindicato Médico de Castilla y León (Simecal) advirtió al consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, que “ninguna organización sindical o de otro tipo puede arrogarse la representatividad de todo el colectivo médico, al estar este fuertemente dividido, y en el que lo habitual es que primen los intereses personales sobre los del colectivo”.

La Junta Directiva de Simecal indicó que mantuvo una reunión con Vázquez en la que le trasladó sus reivindicaciones, y puso de relieve que “el enfrentamiento, la desmotivación y el desánimo, afectan cada vez a más médicos y se han instaurado ya como algo habitual en los servicios hospitalarios y en los centros de salud”. Una situación que aseguraron “está propiciada por una gestión (autogestión de los servicios y los centros de salud, lo llaman) caótica, no homogénea y donde falta autoridad y competencia central que gestione con eficiencia la ingente cantidad de recursos públicos que consume la sanidad”.

Los dirigentes de Simecal recomendaron a la Junta que, ante la falta de especialistas en medicina familiar y comunitaria disponibles, nombre o contrate a médicos generales antes de que “se nos vayan a Europa a ejercer, que son los que se van mayoritariamente”. Otra opción sería, según esta organización, “reinstaurar el cuerpo de Médicos Titulares de Asistencia Pública Domiciliaria, a través de las oposiciones pertinentes”. “Este cuerpo es el que tradicionalmente atendió a la población rural, con mejores resultados en sanidad y salud pública”, aclararon.

Asimismo, los responsables de Simecal defendieron el actual modelo de Atención Primaria basado en los equipos de las zonas básicas de salud, como demarcaciones territoriales en las que se ubican los centros de salud y los consultorios locales como estructuras básicas para prestar la asistencia. “Entendemos que este tiene que seguir siendo el parámetro fundamental de planificación rural y no el número de habitantes de cada Zona Básica de Salud”.

En este sentido, denunciaron que el modelo de Atención Primaria original “se ha ido dividiendo en la práctica en dos, el rural y el urbano, en los cuales las condiciones laborales están cada vez más alejadas, en detrimento de los médicos con ejercicio en el ámbito rural, influyendo negativamente esta situación en la asistencia que reciben los castellanos y leoneses que residen en el medio rural fuertemente envejecido y despoblado”.

En cuanto a la asistencia hospitalaria, exigieron la implantación de los tiempos de trabajo y descanso de acuerdo con las directivas europeas, “empezando por los grandes servicios hospitalarios, con plantillas insuficientes y con listas de espera descontroladas”. Por último, incidieron en que para seguir siendo viable económicamente y poder prestar una asistencia de calidad, “el actual Sistema Sanitario de Castilla y León, necesita acabar con grandes áreas de ineficiencia en su funcionamiento, generadas en los últimos diez años”.