Te explicamos los cuatro expedientes que afectan a estos terrenos; sanción, derribo, permuta y agrupación de la edificabilidad. Las incógnitas sobre las valoraciones de los terrenos a intercambiar entre el consistorio y la constructora siguen en el aire, así como la posible multa.
De no ser por el inefable Cerro de los Moros, sería la polémica urbanística del año en el Ayuntamiento de Soria. Tanto que es capaz de opacar, en el que puede haber sido el último ‘pleno hábil’ de la legislatura, a la salida de Saturnino de Gregorio de Ciudadanos camino al Partido Popular (“un ejemplo magnifico de lo que no debe ser la política”, describía Marisa Muñoz de Podemos y del que “tanta culpa tiene quien se va como quien acoge”, para el alcalde mientras Saturnino se defendía; “aquí no hay corrupciones ni transfuguismo”, y todos coincidían en que será la ciudadanía quien juzgue dentro de dos meses) y a la aprobación de la mayor licitación de la historia de la ciudad (que renueva por 15 años su contrato para la gestión de las basuras con Valoriza ampliando un 23% el personal, con vehículos eficientes y abriendo el punto limpio también los domingos mientras la oposición lamenta que solo se haya presentado una empresa al concurso, recuerdan que Valoriza está en venta y que su matriz – Sacyr- fue multada por pactar ofertas públicos con la competencia).
Una polémica que, aparentemente, parece mayor por lo que genera en el imaginario colectivo de los ciudadanos que por la realidad en sí. 7 viviendas o una planta más o una menos en un entorno de expansión urbanística no parecen ser para tanto, o sí, pero generan suspicacias y comentarios ante la sensación de que los poderosos se salen con la suya por la vía de los hechos consumados. La oposición en pleno se ha lanzado hoy contra el equipo de gobierno por este tema; “Quieren dar cobertura a lo que ya está construido”, “para hacer las cosas bien el orden es importante” o “hay una empresa aprovechándose de los derechos de una propiedad de todos los sorianos”, describían Muñoz, De Gregorio y Remacha. Mientras Luis Rey les acusa de montar un “circo” político con el único objetivo de hacer campaña con “mentiras, medias verdades e intoxicaciones”.
Llegados a este punto parece lógico hacerse algunas preguntas que traten de aclarar el tema. Cómo está la situación ahora mismo, qué se ha aprobado hoy y porque no se aprobó antes, cuáles son las opciones para esa quinta planta y, seguramente lo más importante, ¿acabará ganando la constructora con esta acción y perdiendo el ayuntamiento? Tratemos de explicarlo aunque, ya avisamos, solo el tiempo podrá resolver algunas dudas.
Lo bueno es que en este punto el relato de los hechos es bastante unánime y hay un hecho evidente: la empresa Domus construyó en su edificio Mirador Sur una planta más de las que permitía el ordenamiento urbanístico de la ciudad y sus licencias de obra. Según se desprende de lo expuesto hoy en el salón de plenos, la empresa construye esta planta extra, “mal hecho”, reconoce Luis Rey, porque confía en sacar adelante un plan que se complica cuando se constata como necesario una modificación del plan urbanístico de este sector de la ciudad para llevarlo a cabo.
El plan se desarrollaba en varias fases. Para aumentar la edificabilidad de la parcela en cuestión (de unos 5.000 metros) se le pretende sumar la edificabilidad de una parcela contigua de 823 metros. Así a las 66 viviendas que se pueden construir en la parcela en cuestión se le sumarían otras 7 procedentes de esta parcela contigua. En definitiva, una planta más unificando los volúmenes para pasar de bajo + 3 plantas + ático a bajo + 4 plantas + ático.
El problema es que esa parcela contigua de la que se pretende trasladar la edificabilidad no es de la constructora, sino que es propiedad municipal. Se plantea la permuta de esa parcela por otra que, si es propiedad de la constructora y que se encuentra junto a los márgenes del río Duero, concretamente en la que se viene realizando la representación durante la noche de las Ánimas.
Así, puesto que la empresa “adelantándose a las circunstancias, se puso a construir más de lo que debía”, en palabras de Rey, ahora mismo el consistorio cuenta con 4 expedientes abiertos que tienen relación con la misma parcela. Los dos primeros se abren cuando se tiene constancia de la infracción cometida por la empresa. Uno podría acabar con una sanción económica a la constructora y el otro tiene por objetivo revertir la legalidad, es decir, podría acabar dictaminando la obligación de tirar esa planta construida de más.
Los otros dos expedientes tienen que ver con la negociación que tienen en marcha constructora y consistorio. Uno servirá para la permuta de los terrenos y el otro para traspasar esa edificabilidad de 7 viviendas de una parcela a la otra. “Para hacer las cosas bien el orden es importante”, avisaba la concejala de Podemos que indica que “nadie se cree que se vaya a derribar la planta para luego volverla a construir”.
Llegados a este punto, y dando por bueno el plan del consistorio, la oposición se plantea qué medidas se van a tomar para cerciorarse de que la empresa que construyó más de lo que podía no salga ganando con esta situación. La sanción grave podría ir de los 10.000 a los 300.000€ y Saturnino de Gregorio avisa que “la multa no puede ser menor de las plusvalías que obtenga la empresa” por esa planta extra.
De la misma manera, la otra incógnita es la valoración de las parcelas a intercambiar entre empresa y consistorio. La oposición ha preguntado hoy en el pleno al equipo de gobierno, pero no ha obtenido respuesta en el plenario. Lo que si ha informado Rey es que la empresa ha presentado un escrito señalando que “está de acuerdo con la permuta y con las valoraciones” realizadas por el consistorio.
Al margen del debate técnico y jurídico, el pleno del Ayuntamiento de Soria ha votado este lunes la aprobación inicial de la modificación urbanística de este sector. Toda la oposición ha votado en contra aunque “nadie discute que esta ordenación sea la mejora para la ciudad”, en palabras de Luis Rey. Con su mayoría absoluta el PSOE ha sacado para adelante esta modificación asegurando que cada uno de los 4 expedientes son independientes y que pueden seguir cursos administrativos en paralelo.
Esta votación abre la puerta, no es todavía definitiva, pero va camino de serlo en los próximos meses, a esa quinta altura ya construida. El concejal del equipo de gobierno Luis Rey ha indicado que el resultado de este trámite no afectará a la sanción que deba caer sobre la empresa e incluso sobre la ejecución de la orden de derribo de lo ya construido por encima de la legalidad.
La modificación aprobada este lunes fue ya llevada a pleno el pasado octubre, pero cuando la oposición denunciaba que lo que se quería aprobar ya era una realidad (esa quinta planta) el asunto fue sacado del pleno. Ahora los 4 expedientes transcurren en paralelo, uno con final esperado (la agrupación de la edificabilidad), otro encaminado aunque no lo suficientemente detallado (la permuta de las parcelas), otro totalmente en el aire (si finalmente se derribará esa planta extra) y el último, clave, a la espera de ser baremado (la sanción a la empresa por construir esa planta sin permiso).