Un sitio espectacular donde dejarse enamorar de sus envolventes rincones que invitan a disfrutar de la familia y de los amigos en un ambiente relajado.
A tan solo 20 minutos de Soria, en el término municipal de Almarza, se encuentra Matute de la Sierra. Un pequeño y tranquilo pueblo con una esencia incomparable. Nada más entrar en la localidad, la belleza de la Casona de Santa Coloma te deja perplejo. Su imponencia llama la atención. El exterior es de piedra vista. Una gran casa cuya simetría rompen dos majestuosas torres que te permiten dejar volar la imaginación y sentirte en un cuento de hadas. Se trata de un lugar para perderse y descubrir sus singulares rincones. Uno de ellos es un pequeño patio recogido pero con una belleza que te atrapa y te invita a complacer a tu paladar, con una copa de vino mientras disfrutar de una maravillosa tarde. Su otra zona ajardinada también brinda la oportunidad de disfrutar de los soleados días que nos regala Soria. Además, resalta el interior. De estilo rural tradicional, con grandes vigas de madera en el techo y amplios salones donde disfrutar de la comida y la compañía. El restaurante dispone de dos amplios salones donde regalar a tus sentidos los placeres culinarios que su variada carta ofrece.
La zona del comedor de arriba te llama a visitarla. La luz que entra por sus grandes ventanales te empuja a disfrutar de las vistas del jardín. Desde esta perspectiva se puede contemplar mejor la magnitud y la belleza del lugar. Las pinturas de bodegones y las esculturas de Leonor Izquierdo y Antonio Machado tampoco pasan desapercibidas. Pertenecen a artistas de la zona a los que Eduardo, propietario de La Casona, invita a exponer sus creación para que el público pueda disfrutarlo mientras degusta los suculentos y deliciosos platos. En la parte de abajo se encuentra otro gran salón comedor con chimenea, que hace las delicias de la sala en el tiempo invernal.
La variedad culinaria está servida. De entrante una tostada de pan rústico con un revuelto de huevos te hace abrir el apetito, para proseguir con unos bastones de berenjena a la miel. Un plato diferente, exótico y delicioso con el que sorprenderte en cada bocado. Continuamos con unos chipirones con salsa sobre una cama de cebolla caramelizada que vuelve a despertar todos los sentidos. Como platos principales, la diversidad está servida. Jugoso y crujiente confit de pato, entrecot en su punto con pimientos del padrón, pollo asado con salsa de miel o bacalao en salsa con verduras. Estos son algunos de los segundos. No pueden faltar unos deliciosos postres con los que completar el menú. Tarta de queso, flan de huevo con dulce de leche o tarta tres chocolates. Deliciosos pecados con los que terminar la comida de la forma más dulce.
La Casona de Santa Coloma es un lugar que te envuelve y del que no quieres despedirte. Despierta muy variados sentimientos una vez entras por sus puertas. No hay una mejor forma de sentirlos que con una copa en una de sus diferentes estancias. La magia te atrapa para disfrutar de su agradable ambiente.
El alojamiento es otra de las maravillas que esconde el lugar. Cada estancia tiene un nombre característico de la provincia de Soria. Entre ellos se puede encontrar Sierra Cebollera, Montes Claros, Acebal de Garagüeta, Cerro de San Juan, Sierra del Alba o Sierra de Carcaña. Cada una tiene su propia esencia, pero todas evocan paz y un sentimiento que invita a quedarse.
El establecimiento cuenta con veinte amplias habitaciones, de las cuales dos son apartamentos completamente equipados. Todas disponen de espaciosos cuartos de baños, además de cómodos sillones donde relajarse y olvidarse de la ajetreada vida diaria.
La Casona de Santa Coloma es el lugar perfecto para organizar encuentros con familiares y amigos, y quedarse a disfrutar de las maravillas que ofrece la zona.